Claudia Sheinbaum en una firme congruencia con la perspectiva nacional, más allá de la tendencia cuatroteísta de la que ya se vio se encuentra muy alejada de la realidad, tiene ante sí detener el ritmo de deterioro institucional; revertir la tendencia de un gobierno socialistoide, y lo principal iniciar la reconstrucción nacional.
Nada fácil, ante el escenario y la consigna que le está dejando el presidente saliente, para ella, significa punto de partida para construir y consolidar una democracia reformista, consolidar un gobierno de vinculación bien aplicando las disposiciones constitucionales resultantes de las deformaciones morenistas y formular un programa concertado de gobierno.
Debe establecer un diálogo nacional basado en un trato serio, respetuoso y constructivo entre actores culturales, económicos, mediáticos y sociales.
Las designaciones de las Carteras de primer nivel, y comparsas que tendrán a su cargo la evolución de la administración del país, la de gobierno, aún está en veremos, el cambio de señales puede llegar desde el “dugout” chiapaneco, dejando a la presidenta como simple operadora, aunque en la apariencia es un honor estar con Claudia hoy.
La mayoría de los personajes presentados por la presidenta electa, ha merecido el aplauso ya que se ha ceñido a un escrutinio de buenos antecedentes y atributos profesionales. No de todos, algunos se han derivado del pago de facturas políticas y no por merecimiento.
Muchos en la designación se tropiezan con sus propios pies, Se han ido quedando en la vereda y a la orilla del camino, entre otros Fernández Noroña quien se atrevió a un público reclamo, ante el desdén de Sheinbaum, a lo que él suponía haber conseguido con su lambiscona actuación a lo largo de seis años como senador de la República. Faltan por nombrar sub secretarios y un sin número de directores generales. ¿Veremos a un morelense destacando en esta competencia?
El nombramiento del ministro en retiro Arturo Zaldívar como coordinador de Política y Gobierno de la Presidencia, desde donde supervisará la implementación de la reforma judicial, deja mucho que desear y muy claro que fue un premio de consolación.
Le pasó lo mismo que al satánico Doctor Hugo López Gatell cuando lo hicieron a un lado de la Subsecretaría de Prevención y Promoción de la Salud, en la Secretaría de Salud, tras ser acusado de actuar con negligencia ante el avance del virus SARS-CoV-2 en el país, por discriminación, por violencia política de género y por desabasto de medicamentos.
A ambos casi los nombran Gerentes de Cuadra del Sector Viene-Viene, de López Gatell sigue latente la acusación por genocidio que seguramente prosperará al ya no tener la protección Macuspana y por lo que se ve, tampoco de la presidenta electa.
La traición a la Constitución que hiciera el ex presidente de la Suprema Corte de Justicia Arturo Zaldívar, lo convirtió en un hombre indigno de confianza de Claudia Sheinbaum, quien traiciona una vez, traiciona siempre. Remitido a un puesto en donde se ventilan asuntos sin importancia demuestra que la lealtad política no merece respeto. Tristemente por ese puesto transitó el estimado amigo Rabin quien mereciera injustamente el olvido y la marginación de AMLO.
¡Por fin! A dos años de la «inauguración» oficial ocurrida en julio del 2022, este viernes inicio producción la Refinería Dos Bocas en Paraíso, Tabasco, hoy llamada Olmeca. Su construcción, se hizo en un ¡tiempo récord! según el presidente López, dicen que producirá combustibles en septiembre, ¡peeero! la Agencia Internacional de Energía estima que eso ocurrirá hasta finales del próximo año, Claudia Sheinbaum dijo que esa producción vendrá a reducir el precio del combustible, tema que ha sido pura mentira presidencial con los subsecuentes gasolinazos.
Lo que si es cierto es que, con la demora de dos años, más que combustibles, lo único que vergonzosamente ha producido la refinería de Dos Bocas y garganta económica profunda, es puro ¡atole con el dedo!
Aquí entre nos, ayer volvimos a vivir un lunes negro recordando al lunes 19 de octubre de 1987, cuando los mercados de valores de todo el mundo se desplomaron en un intervalo de tiempo muy breve. Implorando a las reservas de divisas y a los mecanismos de control para amortiguar el golpe en la economía mundial, Andrés Manuel López Obrador, presumiendo al llamado superpeso como uno de los principales resultados de su gestión económica, afirmó que no le preocupa la caída en el tipo de cambio, “Podemos resistir un poco más”, dijo el presidente,
Ante ello analistas económicos serios, propios y extranjeros discrepan de esa bufonada presidencial señalando que mientras en México exista incertidumbre política no se tendrá regresión en los valores de nuestra divisa que motive a cualquier inversión.
La que debe preocuparse en lugar de andar perdiendo el tiempo y gastando dinero en la comparsa itinerante de López Obrador es la presidenta electa, recibirá un país con mucha volatilidad, carente de recursos, elevado gasto, poca inversión y mucha demanda de servicios que lo orillan riesgosamente a una gran inestabilidad social. Aguas Doctora Sheinbaum las consecuencias de un triste ejemplo lo tiene enfrente y se llama, Venezuela.
Amigos como siempre les dejo un saludo ¡con mucho afecto!
