1.- Lozoya se hizo el harakiri; pagó
2.- Congreso
3.- Gritos festejados
4.- Hasta el 30
1.- Emilio Lozoya cruzó los umbrales permitidos, se creyó por encima de la ley, creyó que aportando algunos datos sería suficiente para dormir al velador, y se equivocó; su falta de cálculo lo llevó a la cárcel con todo merecimiento, y ahora ni para cuándo puede pensar en la salida, y pudiera pensarse en que su suerte se acabó; tenía la llama apenas encendida, su libertad pegada con alfileres y sopló hasta que se apagó la vela y se acabó la libertad; a remar contra la corriente desde algún sitio del penal, como para advertir a todos que no se está en los tiempos donde sólo se les daban un par de nalgadas, algún sustito y para fuera, a portarse bien, porque ahora se aplica la ley; en ocasiones no como se quisiera, no tan severa como debería ser, pero llega el día en el que se va a la sombra.
Emilio Lozoya a la cárcel, siendo uno de los fieles representantes de la derecha, hombre de todas las confianzas del presidente Peña, un enlace importantísimo, y ya van dos, ahí se tiene a Rosario Robles y ahora a éste, y todavía se esperan más, con todo los titulares de impartir la justicia parecen ciegos o negligentes o cargados hacia la derecha, pero de vez en cuando la vida lleva a cada quien a su lugar, y el que la hace, termina por pagarla
No creo que ningún personero de la derecha se atreva a hacer algo por Lozoya, o por el señor Marko Cortés después de sus sabrosas declaraciones, en donde reconoce que si bien les va, en el 2022 se podrá rescatar la gubernatura de Aguascalientes, con lo que da la impresión de que se les cayó la venda de los ojos y ya se dieron cuenta de que el pueblo acierta en sus elecciones y sabe torcer para el lado indicado, para con quien le llevará la esperanza de que un mundo distinto es posible, aunque nada llega por magia.
Marko el pasado fin de semana y Lozoya este lunes, con lo que se recibe una respuesta doble en el buen escenario de cara al futuro, y si se agrega lo que sucedió en los Estados Unidos que tienen ya a García Luna, y Peña Nieto debe andarse escondiendo para que no le griten tres verdades. Aunque el cinismo es evidente, no será nada cómodo correr de un lado para otro pretendiendo escapar de personas que, en realidad, son las voces de su conciencia venidas desde afuera, del pueblo al que paulatinamente se quitó la venda.
La oposición está en peores condiciones de lo que se esperaba; no tiene ni liderazgo ni idea clara hacia dónde dirigirse porque sabe perfectamente que a sus candidatos se les va a cuestionar y con sobrada razón, aunque una buena parte irá cayendo en la cárcel, y los que sigan en libertad, no querrán arriesgarse a ponerse en el escaparate, no vaya a ser que inicien investigaciones, por lo que alejados quizá pudieran salvar el pellejo, lo que, en estos tiempos de justicia, es apreciado y se juega en términos literales, después de tantos años de impunidad, los cuales están llegando a su final con trajes a rayas.
Después de Rosario Robles, de García Luna, de Emilio Lozoya, debe ser conveniente ir por gobernadores y luego por presidenciables, por ex presidentes, por todo lo que huela a corrupción, y presentar las pruebas correspondientes para no terminar como Calderón cuando hizo el ridículo en Michoacán y no logró que nadie se quedara en la cárcel al no haber pruebas sobre los dichos del entonces presidente que desató una guerra contra el narco, pero con resultados deplorables, bañando el territorio nacional con sangre mexicana, la de abajo; por lo general es la del sacrificio, la sangre y los muertos, hasta que la justicia llegue a sentarse entre los que tengan conciencia de ello.
2.- En el congreso Ary Barrera para que se facilite dinero hasta por el 25 por cieno de sus prerrogativas a los alcaldes; por qué no mejor trabajar para que tengan más dinero.
3.- El grito homofóbico que se grita en los estadios se festejó en la tele, hoy como se corre el riesgo de perder el negocio, critican; si nada se perdiera, se seguiría festejando.
4.- Cuauhtémoc Blanco está en el lugar 30 de entre 32 gobernadortes.
