“¡No hagas daño a un periodista, porque lo pagarás toda la vida!”.
Por desgracia, no hay semana de las 52 que tiene el año que no haya accidentes mortales en el Libramiento de Cuernavaca, amén de las decenas de heridos y daños que por millones de pesos se siembran en los múltiples percances, entre choques, volteretas o accidentes en esa vía de comunicación, vital para la Capital del Estado… En los tiempos de Enrique Peña Nietocomo Presidente, “a precio de oro” la Secretaría de Obras Públicas de su Gobierno construyó esa vía rápida de comunicación de sólo 14.5 kilómetros que mucho se cacareó en aquel momento, para justificar su disparada corrupción a 29 kilómetros porque “los listos” de aquel entonces en esa Dependencia, sumaron los de subida y los de bajada… Peor aún fue cuando el mañoso Graco Ramírez, entonces Gobernador del Estado, puso en boca del Enrique Peña y sólo con una lona escenográfica para sostener su dicho inaugural con ese falso nombre que se le daba al tramo carretero como ‘Paso Exprés Tlahuica’, de 8 carriles, dicho al estilo de la Secretaría de Obras Públicas “con 4 de subida y 4 de bajada” que es la Calzada de las Tres Mentiras, que sólo sería la de una verdad por lo del ‘paso’ y las dos mentiras por lo de ‘exprés y lo tlahuica’, pues de acuerdo con la Carta Urbana de la Capital del Estado es y se llama oficialmente Libramiento de Cuernavaca… La regada del entonces todopoderoso Graco hoy temeroso de que le den un levantón los judiciales, fue que con todo su poder no tuvo ni la capacidad ni la relación con el entonces Presidente Municipal de Cuernavaca ahora Gobernante con licencia, para que el Cabildo del Ayuntamiento cumpliera con la tramitología necesaria por el cambio de nombre que él impuso, sin ningún fundamento conforme a Derecho… Luego de lo anterior, lo del mentiroso “Paso Exprés” sólo queda en la historia, para que así lo llamen los ignorantes y confundidos, mientras lo permitan los del Ayuntamiento que temporalmente tiene a una Presidente Sustituta, Catalina Atenco, por la licencia, torpezas y descuidos del ‘alcaldito reelectorero’ José Luis Urióstegui Salgado, quien no promovió nada para definir y confirmar con precisión el nombre de esa rúa vial… ¿Lo hará Catalina…? Retornando a lo del Libramiento mortal de Cuernavaca, pese a la iluminación e inmensa cantidad de arreglos, reparaciones, correcciones, restauraciones y construcciones que se le han hecho en menos de 10 años, los presuntos responsables de la enorme cantidad de muertos, heridos y daños, son la propia Secretaría de Obras Públicas que amén de los señalamientos para tratar de controlar los límites de velocidad con los letreros y balizamiento asfáltico, más la total falta de vigilancia tanto municipal como estatal y federal, que resultan ser a final de cuentas los omisos, no sólo para controlar las velocidades mínima y máxima que no debe ir más allá de los 80 kilómetros por hora en ese multirreferido Libramiento que para nada es Paso Exprés… Mientras se siga insistiendo con ese criminal nombre no faltarán los kamikazes-corredores provenientes de la Autopista Miguel Alemán o de la Autopista del Sol, que deveras se la creen de que ahí pueden correr a como se les de la gana, ni faltarán los idiotas que lo hacen a más de 150 y hasta 180 kilómetros por hora… Más todavía, amén de que es un tramo municipal de acuerdo con la Carta Urbana, defínase si es responsabilidad del Gobierno Federal su vigilancia, ya que es precisamente la Secretaría de Obras Públicas quien le da mantenimiento y realiza las obras necesarias para sus reparaciones y adecuaciones… ¡Dejen de hacerle al ‘Tío Lolo’, pues los muertos, heridos y daños que ahí ocurren son de su estricta responsabilidad por la omisión, tanto del Ayuntamiento como del Gobierno de la República, por lo de la Guardia Nacional y Obras Públicas… ¡Ahí la dejamos! ¡Hasta mañana que será un día más!