¿Fue correcto que Claudia Sheinbaum no invitara al Rey de España a la toma de posesión, con tal de estar bien con quien le obsequió la candidatura a la presidencia? ¿incurrió en una grosería que a lo mejor nunca fue su propósito?
Una frase tan célebre como “Ese no es mi problema”, le permitirá reflexionar sobre los síntomas de distanciamiento que se estarían presentando entre España y México.
El individualismo de Andrés Manuel estaría contribuyendo a un estado de indiferencia, lo cual se traduce en escenarios de afectación a una sana convivencia, donde el trabajo de comunidad hispana estaría pasando por el último momento de debilidad al ser en ese momento presidenta electa.
Pero el propósito no es polemizar frente a las responsabilidades de la presidenta Constitucional en el engranaje de la sociedad; contrario a ello, sí es generar conciencia sobre lo que se puede hacer para recuperar cada día las relaciones con España.
Ahora, cuando el relevo presidencial tocó a la puerta del Macuspano López Obrador, la asunción del poder de Sheinbaum parece llegar marcada por el estigma de un Maximato. El hoy ex presidente había dicho que, al terminar el mandato se retiraría a su finca Chiapaneca y dejaría para la vida pública, sin embargo avizora que es una más de sus crueles mentiras, advirtió que se va a quedar en la capital mientras se “aclimata”.
¿Aclimatarse, a qué? Expresión que deja mucho a la especulación sobre el papel que el ex presidente López Obrador, desempeñará al margen del gobierno de la presidenta Constitucional Claudia Sheinbaum. Deja entrever el riesgo de que se produzca un “nuevo Maximato” tal y como hizo el general Plutarco Elías Calles con sus sucesores Emilio Portes Gil, Pascual Ortiz Rubio y Abelardo Rodríguez hasta que llegó el General Lázaro Cárdenas y lo puso de patitas en el exilio.
En la lista oficial de los invitados que estarán presentes en la asunción presidencial, destaca el nombre del gobernante cubano Miguel Díaz-Canel, invitado y aplaudido con frecuencia por el presidente saliente Andrés Manuel López Obrador y por la misma Claudia. Hay que recordar que Díaz Canel por la forma de gobierno que encabeza asume la figura dictatorial que es criticable por los países latinoamericanos y el invitarlo es reconocer la Dictadura como gobierno, eso, es una ofensa al pueblo de México.
Estados Unidos se distingue al enviar a la primera dama, Jill Biden, una mujer para acompañar a otra mujer, eso habla de un vaticinio positivo ya que al pueblo norteamericano sin duda lo gobernará otra mujer Kamala Harris, con la que se debe acordar los detalles de la relación entre ambos países, dejando atrás las expresiones acusadoras y retadoras emitidas por AMLO sobre el caso Mayo Zambada.
Claudia, como cualquier ser humano, tiene en su ego quizá la respuesta a la especulación que aflora con las actitudes despectivas y burlonas de Andrés Manuel, científica que supera a la ideología de izquierda evitando fanatizarse y actuar con sensatez renunciando al continuismo negativo para enfrentar los grandes retos que representa el país.
Hoy México vive un hecho inédito, el inicio de un sexenio presidencial conducido por primera vez por una Mujer.
Juan Francisco Ealy Ortiz, presidente y director general de El Universal, escribe hoy en ese diario: En este México de 2024, enfrentamos hechos inéditos, algunos amenazantes, otros esperanzadores.
Hoy es muy clara la posibilidad de reencontrar la unidad nacional, la concordia entre los mexicanos y dejar a un lado la división, el encono y la diatriba.
De manera paralela, atestiguamos el resurgimiento de una mayoría parlamentaria que parece coquetear con la tentación de avasallar a las minorías, ignorar las voces de la pluralidad e imponer la imposible unanimidad sobre las distintas visiones de país. Hoy, más que nunca, se necesita escuchar a todas las voces. El país no puede volver a los tiempos de la hegemonía de un partido oficial, a los momentos de la aplanadora legislativa que pasa por encima de la oposición.
Hasta aquí la cita.
Claudia debe atender a todas las voces y no someterse al silencio impuesto por AMLO como hiciera este fin de semana en Nayarit ante el reclamo de un trabajador del Poder Judicial.
Hoy martes primero de octubre 2024, Doctora Claudia Sheinbaum Pardo, hoy, Usted es la Presidenta de todas y todos los mexicanos.
México, creo en ti,
porque escribes tu nombre con la equis,
que algo tiene de cruz y de calvario;
porque el águila brava de tu escudo
se divierte jugando a los volados
con la vida y, a veces, con la muerte.
Ricardo López Méndez
Amigos como siempre les dejo un saludo ¡con mucho afecto!