Cuando te encuentras en un proceso judicial y eres interviniente de alguna parte, te involucras con infinidad de términos jurídicos, los cuales la mayoría de las veces no forman parte del vocabulario común; por citar a la joya de la corona en este tipo de procesos, como son las pruebas ofrecidas y desahogadas en un Juicio, motivo por la que el juzgador debe ser escrupuloso y exhaustivo al momento de razonarlas, pero ¿Cuál es la importancia de este razonamiento probatorio?
El razonamiento de las pruebas es de mucha utilidad para la práctica jurídica, en virtud de que para que exista la racionalidad probatoria dentro de los procesos de índole judicial deben coexistir armónicamente, la correcta valoración de las pruebas, el cauce que conecta los hechos y la averiguación de la verdad; subrayando cuatro características fundamentales: La relación de la finalidad entre prueba y verdad; la verdad – correspondencia; además que no es posible llegar a certezas absolutas y por último que es un razonamiento probabilístico.
El filósofo español Jordi Ferrer destaca que el razonamiento probatorio está compuesto por un conjunto de inferencias (normalmente encadenadas) que van desde las afirmaciones sobre los hechos contenidas en las pruebas presentadas, hasta las conclusiones sobre los hechos probados o no probados. Lo que se traduce en que el objetivo de todo razonamiento probatorio se centra en acercarse lo más posible a la averiguación de la verdad sobre los hechos del caso.
En ese sentido, la importancia del acervo probatorio una vez que ha sido admitido, se basa en que cuanta más información relevante y fiable aporten las pruebas, mayor será la probabilidad de acierto en la decisión. Entonces, los Juzgadores no solo deben ocuparse de aplicar en las sentencias un razonamiento inferencial, sino también de estudiar, identificar y sustraer la cantidad y calidad de la información con lo cual se motivarán los razonamientos lógico – jurídicos que sustenten el sentido de los fallos. En otras palabras, no importa solo deducir, sino también seleccionar las afirmaciones o ideas que se dan como ciertas, pues ellas servirán de base a un razonamiento o una discusión.
Pues bien, al ser la motivación jurídica la exposición de los razonamientos probatorios y fundamentos en que se basa una decisión, lo cual es obligatorio para todas las autoridades jurisdiccionales en términos de los preceptos 14 y 16 de la Carta Magna; por lo que, resulta necesario que los Juzgadores tengan mayor capacitación sobre el tema, ya que el destino de los beneficios será exclusivamente para los justiciables. Además de ello, es importante precisar que la Suprema Corte de Justicia de la Nación, se ha ocupado de crear con excelentes expertos en la materia, un Manual de razonamiento probatorio, el cual resulta una herramienta trascendental e indispensable para poder hacer realidad la garantía al derecho fundamental de la prueba y el derecho al debido proceso en la vía judicial. Los cuales una vez que se aplican de forma correcta, garantizan el acceso a la Justicia y el respeto a los principios generales del Derecho.