SE QUEDA CUAUHTÉMOC BLANCO COMO GOBERNADOR DE MORELOS

Si El titular del Ejecutivo de Morelos decidió no solicitar licencia para separarse del cargo para competir como candidato plurinominal a una diputación federal de la coalición Juntos Seguiremos Haciendo Historia; Blanco Bravo aseguró que correrá el riesgo porque seguramente lo tratarán de “bajar” a través de impugnaciones.
Abrazado de su secretario de Gobierno, Samuel Sotelo Salgado, a quien refirió que “se iba a quedar”, el mandatario morelense aseguró que la ley no le obliga a dejar la gubernatura; informó que no realizará campaña ni los fines de semana.
Desde que quedó inscrito en el segundo lugar de la lista plurinominal federal de Morena para la Cámara de Diputados por la cuarta circunscripción, en la entidad inició un debate sobre el contenido del artículo 55 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos sobre los requisitos para ser diputado federal; trascendió que el equipo jurídico recurrió al Instituto Nacional Electoral para cuestionar sobre los alcances del mandato constitucional.
El máximo ordenamiento estatal establece que el Ejecutivo puede solicitar licencia temporal por un máximo de 60 días, en este caso estaba obligado a separarse del cargo de manera definitiva. Blanco hizo pública su preocupación, ante la falta de diálogo y la oposición de 15 diputados de 20 que conforman el Congreso de Morelos, que la oposición determinara controlar a la entidad.
Otro de los temas que se abordaron en estos días fue la necesidad del mandatario por conservar la inmunidad procesal ante las carpetas de investigación que pesan en su contra; y las diversas acusaciones que señalan la desviación de recursos federales y estatales.
La administración de Cuauhtémoc Blanco finaliza el último día de septiembre de este año; en caso de resultar investido como diputado gozará de la protección constitucional tres años más.
El funcionario y ex futbolista llegó a Cuernavaca como alcalde cuestionado por su residencia; inició su carrera política en tribunales. A unos meses de finalizar su gubernatura se prevé que las impugnaciones a su negativa de separación del cargo lo lleven de nueva a cuenta ante los tribunales.