“¡Si causas mal a un periodista, lo pagarás toda la vida!”.
Tras la partida de nuestro apreciado amigo y compañero el maestro Miguel Ángel Beltrán Fuentes, dejé en este espacio un Obituario en su memoria… Ahora desde Polonia su Hermano Raúl Moncada Fuentes apoyado por su hermana Xóchitl, elaboraron este descriptivo que amén del conocimiento profundo y sentimiento por el Extinto, conlleva referencias que considero merecen quedar en estas líneas… Vayamos al texto: “Miguel Ángel, como lo llamaban sus amigos; o el Profesor Beltrán, como lo nombraban sus colaboradores; o Migue, como cariñosamente le dice la familia, ha dejado de estar físicamente con nosotros… Hoy se queda por supuesto, en nuestro sentir y en nuestros pensamientos a través del cariño, la amistad y el aprecio que supo inspirar en quienes lo conocimos… Hablar de todo lo que él fue nos llevaría muchas páginas, que si bien serían de interés, demandarían varias horas de conversación… Por ello, preferimos enfocarnos hoy en sólo algunos aspectos para evocarlo… Queremos recordarlo como el hombre apasionado, decidido, militante, compañero, amigable y cariñoso que fue como Hijo, Hermano, Esposo, Padre, Abuelo y siempre Amigo… Forjado desde su juventud en los mejores tiempos de la Benemérita Escuela Nacional de Maestros, mejor conocida como la Normal, Miguel Ángel desarrolló su formación docente en las aulas y en la vida… Nunca dejó de ser Maestro; a lo largo de su vida buscó dejar huella en todos los que lo conocimos, con su permanente intención de proporcionarnos una pedagogía de la vida… Y si bien la docencia siempre formó parte indisoluble de su ser y de su actuar, sus mayores pasiones fueron sin duda, la política y su familia… Eso fue lo que dio sentido a su vida y a eso dedicó sus afanes… Desde muy joven, participó activamente en la política sindical del Magisterio y quedó ligado a ella para siempre… Su visión de Maestro prevaleció siempre en la manera como se desenvolvió en la política y en la vida misma… Así transitó por muchos caminos, compartiendo siempre sus experiencias, impulsado por su vocación de enseñar… Hace varias décadas se avecindó en Morelos, donde tuvo también participación política en el Estado, cosechó cercanos, abrió su casa y su corazón a una nueva constelación de amigos que aprendimos a conocerlo, valorarlo y quererlo… Amigos qué, reunidos hoy en torno a su obra y en su memoria, ciertamente lamentamos su partida, pero también celebramos su vida… Una vida pródiga, plena de éxitos… Prueba de ello son sus logros político-profesionales que nos deja como ejemplo y sobre todo, la sólida familia que formó junto con Mary, su compañera de vida por más de 65 años, con quien vio crecer a sus hijos y a sus nietos teniendo como eje la cohesión y el amor familiar… Ellos son su legado personal… Hubo en Él, siempre un común denominador; su pasión por vivir, siempre lleno de proyectos, su visión analítica y sus deseos de ayudar… Si el Profesor Beltránnos está viendo, seguramente ya está dándonos un discurso… Y es así como queremos recordarlo, porque a eso hemos venido, a recordar su vida, su amistad y su palabra”… Con estas breves palabras, insuficientes pero muy sentidas, venimos a decirle a nuestro Amigo, Padre, Hermano, Compañero y Maestro: ¡Hasta siempre, Miguel Ángel…! ¡“Nos vemos luego”…! Hasta aquí la sentida misiva familiar en memoria de don Miguel Ángel Beltrán Fuentes. ¡Hasta mañana que será un día más!
