SEGUNDA PARTE
Al Continuar con el tema vital de La Cumbre Amazónica de Brasil, que es el principal pulmón de nuestra aldea global, y después de referirnos tanto al reclamo de más poder de decisión para los países de la cuenca, como al incumplimiento del Norte en cuanto a sus compromisos de proporcionar cien mil millones de dólares anuales para que los países del Sur en desarrollo enfrenten la crisis climática, apenas el 0,7 por ciento de su renta nacional bruta en ayuda oficial al desarrollo y de doscientos mil millones de dólares anuales hacia 2030 para la conservación de la biodiversidad.
Vamos a referirnos a la criminal explotación de las empresas mineras, también denunciada en la macro Cumbre que reunió a más de treinta mil participantes mismos que aprobaron una carta a los jefes de Estado en que reclaman sus derechos, especialmente la demarcación y protección de sus territorios.
En efecto, “Asegurar los derechos de los pueblos indígenas, comunidades locales y tradicionales” es una de las 113 “decisiones” que componen la “Declaración de Belém”, firmada por los gobernantes y delegados de los ocho integrantes de la Organización del Tratado de Cooperación Amazónica Otca, conformada en 1995 para operar el Tratado anterior suscrito en 1978.
Recordemos, la cuenca amazónica es un bioma de selva tropical con 7,5 millones de kilómetros cuadrados y más de cuarenta millones de habitantes -según datos del gobierno brasileño-, dos millones de ellos pertenecientes a quinientos pueblos indígenas. La Cumbre de Belém fue la primera del grupo desde 2009.
Vamos al motivo de esta entrega, Periodista en español, nos relata que en el bioma amazónico hay 4114 explotaciones garimpeiras ilegales, que echan más de 150 toneladas anuales de mercurio en sus ríos, según registro puntual de la, Otca.
En la misma se acusó que en los últimos cuatro años la actividad se intensificó en Brasil, obvio, bajo el gobierno del expresidente Jair Bolsonaro -2019-2022-, a quien señalaron con pruebas irrefutables de haber siso un incentivador de la minería incluso en tierras indígenas.
Además de acciones para “erradicar la exploración ilícita de minerales”, la Cumbre Amazónica reconoció la expansión del crimen organizado en la región y la necesidad de la cooperación regional para enfrentar los variados delitos, no solo ambientales.
Para ello se propuso un Centro de Cooperación Policial Internacional de la Amazonía con Manaus, capital del estado brasileño del Amazonas. CONTINUARÁ.
Periodista y escritor; presidente del Colegio Nacional de Licenciados en Periodismo, CONALIPE; secretario de Desarrollo Social de la Federación Latinoamericana de Periodistas, FELAP; presidente fundador y vitalicio honorario de la Federación de Asociaciones de Periodistas Mexicanos, FAPERMEX, miembro del Consejo Consultivo permanente del Club Primera Plana, Doctor Honoris Causa por la Universidad Internacional y Académico de Número de la Academia Nacional de Historia y Geografía, ANHG. Agradeceré sus comentarios y críticas en teodororenteriaa@gmail.com Nos escuchamos en las frecuencias en toda la República de Libertas Radio. Le invitamos a visitar: www.felap.info, www.ciap-felap.org, www.fapermex.org, y www.clubprimeraplana.org, y el portal irradia noticias.com