1.- Nadie les pidió rendirse
2.- Uruguay
3.- El Salvador: No
4.- Paraguay sigue
1.- El presidente Andrés Manuel nunca les pidió a los cubanos que están fuera de su territorio que se rindieran, como ellos lo han interpretado y retomado en los medios que no se han cansado de tergiversar lo que dice y hasta lo que no dicta el mandatario, tan de mala fe que han dejado en el camino su poca credibilidad que alguna vez tuvieron.
Hablar de reconciliación no es rendición, pero así lo interpretaron algunos de los personeros de quienes decidieron abandonar Cuba, en lugar de quedarse y luchar por su grandeza, para sacar al país de la crisis en la cual está por el inhumano bloqueo casi desde que triunfó su revolución, con los barbudos de la sierra, encabezados por Fidel Castro Ruz, quien tuvo la visión suficiente para entregar el poder cuando él todavía vivía, e igual sucedió con Raúl, con la finalidad de que no sucediera una balcanización, como se dio en la antigua Yugoslavia, a la muerte de Tito, cuando el país se pulverizó.
Fidel supo siempre llevar las cosas en la isla, en donde existe algún descontento natural contra el régimen, lo que sucede en cualquier país del mundo, incluido el que no se cansa de ser el policía del mundo y de dar clases de moral, al tiempo que millones de sus habitantes son alcohólicos y drogadictos, y las matanzas en las escuelas son lo cotidiano, por el libre tráfico de armas, y que tienen a los presidentes más dependientes del universo de lo que digan los hombres del gran capital que son los que, en realidad, mandan en el país de las barras y las estrellas y que, en sus invasiones dejan desolación, hambre, pobreza y muerte, y nunca libertad ni mejor nivel de vida.
Siempre habrá descontento por el régimen gubernamental, el Maleconazo en 1994. Fidel dejó que zarparan hacia Estados Unidos sin más, cuando pudo exigir al ejército que se los llevara presos. Los dejó que se fueran los que quisieran y el país continuó su camino hasta ser de los mejores en el mundo en medicina, deporte y educación, pese a las grandes carencias que se tienen, pero con un ingrediente a su favor: el amor a la patria y a sus principios que les llevaron a ser de los pocos países en el mundo en donde la desnutrición infantil es casi nula, la educación es gratuita, y sus profesionales de la medicina, en el caso de la pandemia, recorrieron casi el universo.
Si los que se autoexiliaron no son capaces de entender las buenas intenciones que tuvo el discurso de López Obrador, es problema de ellos, al final del cuento es un asunto de los cubanos, y las filias y fobias que llevan en sí son suyas. Sus razones tendrían para abandonar a sus hermanos y a la nación que les vio nacer para irse a un país que no es el suyo y que no les trata más que como moneda de cambio para golpear sin misericordia a un pueblo que ya le demostró al imperialismo yanqui que más le vale que se mantenga lejos de sus intenciones de conquista si no es que quiere sufrir otra bochornosa derrota como que se sufrió en Bahía de Cochinos de abril del 61, del 17 al 20, en donde otras armas nacionales se cubrieron de glorias, como las de México el cinco de mayo de 1862
Si no quieren reconciliarse los cubanos que están en el exilio con los que se encuentran en la isla, ellos se lo pierden, pero que no digan que no se les tendió la oportunidad.
2.- Luis Lacalle, presidente de Uruguay, vio el miércoles 15 las calles pletóricas de uruguayos en protesta contra de las medidas neoliberales que insiste en imponer, pero en la cumbre del Celac, quiso atacar a venezolanos, cubanos y nicaragüenses y salió mal
3.- En El Salvador no habrá ni matrimonio igualitario ni aborto legal; no se incluyó ninguna línea sobre el particular por el gobierno salvadoreño a cargo de Nayib Bukele.
4.- En paraguay sigue la corriente del dictador Alfredo Stroessner, cuando el presidente, Mario Abdo Benítez, sin ninguna diplomacia dijo en la reunión del Celac que no reconoce el gobierno de Maduro.
