Integrantes del Centro de Investigación Morelos Rinde Cuentas advirtieron sobre el riesgo que representa la reforma judicial propuesta por Andrés Manuel López Obrador. Según su análisis, de elegirse magistraturas y jueces por voto popular, el Poder Judicial podría quedar en manos de intereses políticos y de la delincuencia organizada.
En una reciente intervención, Roberto Salinas subrayó que “nos parece que la actual reforma al Poder Judicial no obedece a un cambio real en el sistema de justicia, sino únicamente a intereses particulares que pudieran venir del Ejecutivo”. En su opinión, la reforma propuesta no aborda adecuadamente los problemas existentes, especialmente en el ámbito local, donde los tribunales superiores de justicia y las fiscalías enfrentan serias deficiencias.
Salinas destacó la importancia de una reforma integral que incluya también a las instancias locales. “Una verdadera reforma al Poder Judicial abarcaría incluso la parte local, que es ahí donde nos parece hay un grave problema en la justicia… y no se está considerando reformarlas de fondo estas instituciones”, argumentó. Según él, el actual sistema de designación de magistrados y jueces en el Poder Judicial Federal, basado en exámenes y la carrera judicial, resulta ser el método más idóneo para garantizar la calidad y la imparcialidad en la selección de estos funcionarios.
El director del Centro de Investigación criticó la propuesta de elección popular, señalando que “nos parece que la mejor forma para poder tener a estas personas a los mejores es a través de un concurso, de un examen, de una competencia y no a través de un voto popular que se pudiera prestar a intereses políticos, económicos o incluso delincuenciales”. Según Salinas, la elección popular podría abrir la puerta a una serie de problemas, incluyendo la posibilidad de que el proceso sea manipulado por actores con agendas particulares.
Además, Salinas expresó su desconfianza hacia los foros organizados por el Congreso federal para discutir la reforma. “Desafortunadamente, queremos también señalar que el proceso de los foros que han realizado desde el Congreso federal son procesos… que no han servido para eso, que no se escucha realmente, que no se toma en cuenta las voces que lo expresan, sino que únicamente son simulaciones”, afirmó.