Los temores de una posible invasión rusa a Ucrania se consumaron y las preocupaciones sobre el suministro de petróleo crecieron porque Rusia que es un importante productor de petróleo, está ya recibiendo sanciones de Estados Unidos y Europa, pero ninguna observación de México.
Antes de EE.UU. y Arabia Saudita, Rusia era el rey en la producción de petróleo con 11.5 millones de barriles diarios. En 2020, debido a la pandemia, el país accedió a reducir la producción hasta en 20% para ayudar a regular la caída de los precios. Hoy, Rusia es el quinto consumidor de crudo con 3 mil millones de barriles de petróleo al año.
El aumento en los precios del petróleo provocado por la invasión de Rusia a Ucrania está generando un gran problema para Estados Unidos en América Latina, al restringir las compras de los países importadores de petróleo de Centroamérica y el Caribe, e impulsar indirectamente a Venezuela a reanudar su única diplomacia en la región, la petrolera.
Sin haberse recuperando de una fuerte caída en el turismo por la pandemia de COVID los países del Caribe y América Central enfrentan un gran problema financiero al haber petrolizado sus presupuestos sobre la base de $50 USD por barril este año
Con los precios del petróleo casi el doble de ese nivel, la mayoría de los países del Caribe y algunos centroamericanos tendrán que aumentar su presupuesto nacional en al menos un 20% este año, significa que tendrían que comprar petróleo con recursos que destinarían a la salud, la educación u obras públicas.
La guerra surgida entre Rusia y Ucrania ha motivado que los precios del petróleo ya rebasen a los $100 dólares por barril y fácilmente podrían subir aún más si Putin invade a Ucrania.
Venezuela, que solía ser un gran exportador de petróleo subsidiado a los países del Caribe y América Central, ha visto caer drásticamente su producción de petróleo en los últimos años por la corrupción y la desastrosa gestión de su gobierno, pero, con el aumento de los precios del petróleo, está pronto a desviar algunas de sus exportaciones petroleras actuales a China dirigiéndolas a esos países, con el beneficio de ofrecer un descuento equivalente a sus costos de transporte de su petróleo a China.
Además, Rusia intenta evadir las sanciones de Estados Unidos y exportar petróleo a la región a través de terceros.
Para colmo de males, República Dominicana, Costa Rica y Panamá, que recientemente formaron una Alianza para el Desarrollo en Democracia no califican para préstamos de emergencia del Banco Mundial o del Fondo Monetario Internacional para países pobres, porque son países de ingresos medios.
De no recibir apoyo del presidente Joe Biden dando atención a la inminente crisis petrolera de América Central y el Caribe y ayudar a estos países a obtener préstamos de emergencia de las instituciones financieras internacionales, Maduro intentará llenar ese vacío. No sería la primera vez que Venezuela lo hace, o que los importadores de petróleo de la región se ven obligados a caer en sus manos.
México tiene que ponerse bien previsor, la conducta de la economía global, no es positiva en el ámbito de los energéticos, depende del suministro de gasolinas refinadas en Norte América, del suministro de gas proveniente de ese país y de Canadá, también ha visto disminuir el flujo financiero proveniente del turismo, como en antaño se hiciera, nuestro país petrolizó también su situación económica y lo conduce a apalancarla, ante lo cual, no lo hace un cliente elegible para un financiamiento internacional que regule esa posible alza en el mercado nacional, máxime que ha engañado constantemente de “logros” no obtenidos y de que no habrá gasolinazos, ni definidos, ni maquillados, ahora está obligado a subsidiar el precio de los combustibles.
Rusia, no es un país comunista, ni socialista, Rusia es un país capitalista, capitalista Sue generis, en su territorio tiene la vergüenza de tener polígonos de pobreza polarizados con la acaudalada sociedad que no se opone al derrotero que está tomando la actual política de un personaje de dudosa mentalidad equilibrada, Vladimir Putin.
Amigos la semana tiene siete días y ¡Gracias a Dios es viernes!
