Por más que el presidente de la República se ha empeñado en presentar una visión triunfal de su proyecto cuatritransformista, las evidencias revelan que lo peor apenas está aún por llegar. Todos los días, y no es ninguna exageración el decir que todos y cada uno de los días que encabeza la conferencia mañanera, la manipulación ideológica, los distractores, las falacias y, no pocas veces, francas mentiras, vienen acompañados de su campaña permanente por hacer creer a sus seguidores que el país va mejor que nunca y que su obra de transformación está por concluir con gran éxito. Y estas dos premisas son desmentidas por datos y revelaciones que resultan al gobierno imposibles de ocultar.
Voy a comentar sobre algunas de estas realidades, que incomodan al gobierno sí, pero son resultados reales y palpables, que los habitantes de México están padeciendo. Es conocido en el mundo que el buen humor de los mexicanos hace posible que el pueblo haga mofa hasta de las peores desgracias. Por eso, el inusitado incremento en el precio del limón ha servido para memes y bromas, por ejemplo, como que ya en algunos establecimientos regalan a usted las carnitas en la compra de limones o bien que tiendas de prestigio ofertan el producto en pagos a plazos y sin intereses. Y ¡cómo no!, si en algunos lugares llega a costar hasta cien pesos por kilo.
Es muy probable que usted ya haya resentido la inflación. Hoy contamos con el dato oficial de que la canasta básica incrementó sus precios al público hasta en 180%, en tan sólo mes y medio. Claro, esta medición es parte de lo que los economistas denominan “inflación subyacente”, que no es la que presenta AMLO en las mañaneras, sino sólo la inflación en general. Diga usted de qué servirá el aumento del 22% a los salarios mínimos.
El objetivo de la autosuficiencia energética suena muy bien, así en abstracto. Pero en la realidad, primero debería remediarse el pésimo funcionamiento de Pemex y de la CFE, una a cargo de un ingeniero, más político que ingeniero, eso sí, muy leal al presidente y la otra en manos del personaje más cuestionado del gobierno cuatritransformista, muy famoso por haber encabezado la caída del sistema, que permitió la consumación del fraude electoral en 1988. Todo un dinosaurio, claro representante de la antigua y la nueva mafia del poder.
El año pasado, Pemex únicamente produjo el 4% de la gasolina premiun que se necesita en el país. En concreto, cuando comenzó el sexenio de AMLO, la paraestatal producía alrededor del 30% de esa demanda. Por problemas técnicos, que llevaron a paros no programados, Pemex ha dejado de producir 5.3 millones de barriles diarios de gasolina en sus seis refinerías. Estos datos hablan por sí solos de lo mal que funciona. Y del proyecto de la reforma eléctrica, ni qué decir. Los estadounidenses desmintieron al gobierno mexicano: no están de acuerdo, sí tienen diferencias y muchas dudas. Y la CFE cada vez peor y subiendo los precios de la luz.
En el tema de la salud, ya volvieron a modificar los criterios del semáforo de riesgo de contagio por COVID-19. Pierde peso la cantidad de contagios y se da mucha mayor importancia a los fallecimientos y hospitalizaciones. Es un contra sentido, porque parece entonces que al gobierno no le importa si la gente se contagia, tiene poco interés en la prevención, ya si se mueren, pues es otra cosa. Y mire usted, los fallecimientos por la pandemia aumentaron, en esta cuarta ola en un 54% en 20 estados del país, tan sólo de finales de diciembre para acá. Pero el gobierno cuatritransformista insiste en minimizar la emergencia sanitaria, cuya mala gestión ya tiene a Gatell bajo investigación judicial.
Y si usted quiere le seguimos, hay mucho más de este gobierno que revela su fracaso actual y el abismo al que nos está dirigiendo.
Y para iniciados
Hoy el presidente volvió a mencionar su testamento político, que dice no se va a necesitar, pero ya lo tiene elaborado, por si llegara a fallecer. Así como un monarca o un dictador, como lo hizo Chávez en Venezuela o Castro en Cuba, dejó ver que ya tiene decidido a quién va a heredar el poder, para que continúe con su obra cuatritransformista. ¿Acaso no se supone que en una democracia es el pueblo quién debería decidir a través del voto? ¿Qué no sería el Congreso el responsable de nombrar un presidente sustituto? Una clara muestra de que a AMLO le tiene sin cuidado lo que digan las leyes. Lo que desea es que se cumpla su voluntad. Qué bueno que ya está mejor de salud. México necesita un presidente sano y fuerte. Aunque sí nos preocupa su salud física, cada vez nos preocupa más su salud mental. Ojalá que también de eso se recupere pronto. Los mejores deseos para el presidente, porque sólo un loco actuaría como dictador en una democracia.
La información es PODER!!!