1.- Las preguntas para Rabín
2.- Asesinatos, siguen
3.- Ceci, ¿dónde va?
4.- De la Rosa
1.- No tiene sentido de que hable desde el principio porque es bien sabido que tenía, la familia, una tlapalería, en Tejalpa, en la que nunca había nada; en secundaria fue de los mejores diez, pero de su salón y había como cien; otros, socarrones, dicen que era de los mejores diez en una aula con 11 jóvenes. Actuó de bajo perfil, sin ser nada especial, y en la universidad, la grilla. Si hubiera sido brillante como estudiante, como le gusta difundir, sin duda que lo haría. Lo cierto es su historia de éxito financiero en la política, por sus sueldos, supongo.
Sin duda que fue su gran descubrimiento, de una tlapalería en la que no había nada, a ¿tu mansión?, ¿cuánto cuesta, Rabín?, ¿Con ella cuántas casas de interés social se comprarían?, ¿diez, veinte?. Sería la primera pregunta; la segunda sobre otras propiedades, de haberlas, las tuyas, no las de carnalitos, uno tiene pensión dorada y es regidor, por lo que debe contar con lo suyo, lo que no tiene es apoyo popular, por eso no fue consejero de Morena, después de ser funcionario en la capital, al lado de Villalobos.
Estuviste en el gobierno de Barragán Cena y cuando buscaste ser diputado local, el pueblo no te apoyó; lo lograste después, pero pluri. Fuiste a la comisión de hacienda, lugar al que llegan alcaldes para solicitar préstamos para trabajar y otras cosas. ¿Así fue?, ¿si así fue, qué te decían para convencerte para que los respaldaras?, ¿fue fácil?, ¿hubo seguimiento de lo dicho?, ¿se podrían ver las evidencias, o lo olvidaste al salirte?.
¿Qué hay de cierto de los moches que deben darte compañeros que tú recomendaste para llegar a puestos de elección popular?, ¿es verdad que no sólo es para los de arriba, sino que baja más y más, a de cargos menores?, ¿es cierto que el sable pasa?. No tienes más que decir no, ¿pero si hay testigos de ello, qué dirías?. De seguro, Rabín, sabrás responder y decir que no. Sólo te digo que puede no ser alguien contrario a ti para que digas que son tus rivales, pero, insisto, seguro que no es cierto, que tú eres impoluto.
Las tres preguntas que se llevan son sencillas de contestar para alguien de tantos cargos, aunque la realidad es que de bien poco han servido a la entidad, ¿o sí se han beneficiado más que no sean tus cuates y tus familiares con cargos, así, igual que tú, su aporte comunitario y de eficiencia, sea pobre. Tú y ellos podrían decir lo contrario, que son los salvadores de estas tierras.
Como alcalde, ¿qué necesidad tenías de tirar el zócalo lleno de sabor de pueblo por esa plancha de cemento?, ¿cuánto costó?, ¿no hubo cosas raras?. Esas son preguntas fáciles, es ir al contrato que lo debes tener, pero quiero tocar otro punto, desde la alcaldía fuiste el impulsor principal para que se le quitara a la universidad el cinco por ciento que de los municipios emanaba para la institución. Al final lo lograste. ¿Ya se los dijiste a los universitarios, o se los vas a comentar cuando te presentes ante ellos, RS?.
Caramba, ya agoté casi toda la columna y me falta lo de Octavio Medina Mora, los cajeros del Banco del Bienestar, tu inacción ante el asesinato de los jesuitas, tus días en Alemania, el que dices que en tu oficina se trabaja la política nacional y nunca estás ahí, te la pasas becado en el territorio zapatista. Por lo que veo, regresaré con el asunto.
2.- Parece que la competencia es abierta sobre la comuna más violenta, la capital de los panistas o el terrible Yautepec de los Alonso; este miércoles hubo más muertos y sigue.
3.- Cecilia Rodríguez llegó a estar entre las precandidatas a la gubernatura; al final no se dio y mejor; era bien difícil; ya habrá otras elecciones. Lo que no entiendo es que no se sabe dónde está. Es cierto que su equipo de comunicación es fatal, pero desaparecer así.
4.- Sin duda que el licenciado Carlos de la Rosa merece el respaldo de Urióstegui, el que exige que quien acusa a su secretario general de querer extorsionarlo, que presente la denuncia para que se pueda dar la defensa en los tribunales. Carlos ha dejado claro que no tiene nada qué ver y le creo, para mí, es un hombre honesto, hasta que se demuestre lo contrario. Ojalá y salga adelante; su nombre nunca se ha manchado y ahora tampoco. Sólo un favor, la prensa no es responsable de lo que diga un individuo.
