El Frente Amplio por México ya cuenta con la posibilidad de consolidar una alianza opositora en Morelos. PAN, PRI, PRD y RSP han hecho pública su intención de unir fuerzas para enfrentar a la coalición oficialista en las elecciones de 2024. Incluso hasta actos políticos conjuntos ya son la tónica con que los vemos de la mano.
A diferencia del proceso en el nivel nacional, con la aparición en escena de la figura disruptiva, en la persona de Xóchitl Gálvez, capaz de aglutinar en torno a sí la aprobación y el respaldo de los partidos políticos opositores y diversas organizaciones de la sociedad civil, en Morelos la búsqueda de un perfil competitivo ha sido más complicada.
A su vez, la suma de las clases medias y de las asociaciones civiles a una u otra de las propuestas que los partidos políticos tienen como cartas fuertes no despunta, o al menos no todavía. Lo cierto es que quien llegue a ser abanderada o abanderado, tendrá que respaldar inequívocamente a Xóchitl Gálvez.
La principal crítica que se puede hacer al Frente por Morelos es que varios de los más o menos conocidos participantes en su formación, lejos de compartir la idea de un proyecto de Estado, fincado en el bien común, ideales y valores, están buscando acomodo en alguna de las candidaturas para sus intereses personales y nada más que eso.
Todavía entre este tipo de personajes hay quienes tienen la ilusión de que serían capaces de ganar una contienda electoral, aunque ni en su colonia los quieren ya ni saludar. Pero en el FAM no los van a desechar ni a cerrar la puerta. Los pocos votos que signifiquen podrían ser la diferencia en casos muy específicos y es tiempo de sumar.
De que hay gente valiosa, honesta, con arraigo y amor a la entidad entre sus filas, la hay. Ellas y ellos, difícilmente permitirán que los llamados cartuchos quemados echen a perder el enorme esfuerzo que están desarrollando, pues una imposición de las cúpulas nacionales, sin haber tejido en lo local, pondría en riesgo ya no diga usted las elecciones, sino al Frente mismo en la entidad.
Hasta el momento los nombres que suenan con seriedad en busca de la coordinación del Frente y, en consecuencia, para la candidatura a gobernador, son: Por el PAN, Dalila Morales, Mayela Alemán, José Luis Urióstegui y Ricardo Dorantes San Martín; por el PRD, Adriana Díaz y Matías Quiroz; en el PRI están considerando a Laura Ocampo y a Eliasib Polanco; RSP, trae la carta de Ángel García Yáñez y, sin partido, Vinicio Limón Rivera.
Un perfil que se quiere sumar es el de David Jiménez González, con una extraordinaria trayectoria y muy buena fama pública. Sin embargo, tiene un problema. En lo nacional va con Marcelo Ebrard, a quien coordinó su campaña en Morelos en el proceso interno de Morena y si no va con Xóchitl, de todo a todo, se ve muy difícil que pueda lograr el consenso de sociedad civil y partidos políticos.
En las próximas semanas deberán comenzar los pronunciamientos, públicos y privados, los foros y las pláticas para que cada uno exponga y puedan llevar a México las propuestas, donde finalmente se tomará la decisión.
Y para iniciados:
El proceso para relevar a Gustavo Urquiza Beltrán como rector de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos está en marcha. Tres damas y tres caballeros se han apuntado y todos cumplen con los requisitos para lograrlo. Una vez que la junta de gobierno determine quiénes pasan a la fase final, sabremos los nombres de la terna de la que será elegida la persona que encabezará a la máxima casa de estudios en la entidad. Por lo pronto, mucho se comenta sobre la exigencia de la comunidad universitaria que, por primera vez, sea una dama. Entre ellas sobresale el nombre de Fabiola Álvarez Velasco, no sólo por haberse desempeñado como secretaria general de la institución, sino por contar con el respaldo de los sindicatos, donde también ocupó cargos de dirigencia, y ser, además, reconocida como una persona que cumple su palabra.
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