¡Hace 15 años el temor de una crisis bancaria nos volvió a preocupar, los fantasmas del 94, en ese entonces, se volvían a aparecer!
Me refiero a la debacle económica sufrida en carne propia en 1981/1984 que originara el loco ex presidente José López Portillo continuada por Miguel de la Madrid. La otra crisis económica de México, la de 1994, fue una crisis que surgió por la falta de reservas internacionales, causando la devaluación del peso mexicano durante los primeros días de la presidencia de Ernesto Zedillo y un grave quebranto para el empresariado medio y pequeño con una solución especulativa que solo protegió al gran empresario y obviamente al corrupto gobierno.
Lehman Brother en 2007, sufrió una crisis financiera provocada por los créditos SUBPRIME. Había acumulado tantas pérdidas por títulos respaldados por las hipotecas durante 2008 que en el segundo semestre fiscal se declararon pérdidas por 2800 millones y la empresa tuvo que vender 6000 millones de dólares en activos.
Este martes todas las alarmas financieras del mundo se activaron. El banco que financia a las principales empresas tecnológicas del Silicon Valley presentaba una situación muy comprometida, todo debido a la retirada de 42.000 millones de dólares por parte de sus clientes.
Esta situación obligó a la entidad a mal vender una parte de sus activos para obtener liquidez y evitar los impagos.
Con el espectro de una recesión en EU y una inflación galopante en el mundo, este, podría enfrentar una nueva crisis bancaria.
Por los miedos de los bancos, caen todos los mercados financieros, el mundo enfrenta hoy una amenaza más: el riesgo de un contagio global por un posible pánico de depositantes contra los bancos, los dejarían con una mano por delante y sin la otra por atrás.
Mientras los Banqueros mexicanos en su Convención Bancaria realizada el pasado fin de semana en Mérida la Blanca, se preocupaban por calmar las inquietudes de sus clientes y depositantes de lo ocurrido con Silicon Valley Bank, Credit Suisse y Silvergate Bank asegurando que no contagiarán al sistema financiero mexicano, Andrés Manuel López Obrador con sus dotes de analista financiero descartó afectaciones en México. Aseguró que la economía está bien y que el peso ha resistido sin devaluarse. Presumió creación de empleos, a pesar de que sus números cayeron en diciembre, pero eludiendo alguna responsabilidad, dijo que es porque aún hay outsourcing.
Dijo que muestra de que la economía va avanzando es que el 2022 fue el año que más utilidades obtuvo la banca en el país con alrededor de 250 mil millones de pesos.
Lo cierto es que, en nuestro país, se cuecen habas y bien duras. Grupo Famsa, es la crónica de una estafa anunciada; cayó en componendas de ilegalidades
Ni reguladores ni consultoras privadas alertaron sobre las prácticas ilegales que realizaba la empresa, como otorgar financiamientos a partes relacionadas, cayendo en un conflicto de intereses más allá del apoyar al amigo o al familiar, no, todo fue un acto de corrupción asociada, que hoy difícilmente se rescataría como sucedió con el banco suizo.
Este hecho de corrupción fue detectado en otro Banco de fuerte relación con la familia López Obrador, sin embargo, hay respeto a su clientela, que por cierto es muy selecta, selección que cae en el clasismo criticado por la 4T y que, ellos, los morenistas, acuñan con atingencia al tener sección VIP en sus eventos masivos, lo criticable es que a los asistentes de estas secciones no les tocó sándwiches ni Boing, pero si una canija asoleada en favor de el Gran Tlatoani Macuspano.
El presidente debe preocuparse de la imagen que las empresas remitentes de transferencias bancarias, como Wells Fargo, tienen de Banco del Bienestar. Imagen que les preocupa al pretender acaparar todas las cuentas de los adultos mayores como único punto de dispersión, ignorando a los demás bancos, a Farmacias Guadalajara, a TELECOM. Queriendo hacer acopio monopólico de los 50 mil millones de dólares que se remiten anualmente afectando a los mexicanos, los de adentro y lo de afuera del país.
Hoy 21 de marzo, se cumple un año de haber sido inaugurado el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA), inauguración consecuente de una de las peores decisiones tomada por el Primer Mandatario de México, Andrés Manuel López Obrador, marcando así el derrotero de un gobierno totalitario, radical, matizado de socialista ya que, solo obedece a su arbitrio y capricho.
El Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles, obra pública que nunca debió ser, por falta de una debida planeación, ya que como digo fue resultante de una visceral visión. Pienso que el Macuspano nunca escuchó el consejo de los colaboradores que si piensan y que avizoraban sus acres consecuencias.
¡Mientras tanto, les dejo un saludo con mucho afecto!