Este martes fue entrevistada la diputada local del Partido Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), Ariadna Barrera Vázquez, quien, entre otros temas, no descartó buscar la candidatura de ese instituto político a la gubernatura, para las elecciones del 2 de junio de 2024. Sin embargo, indicó que será necesario esperar los tiempos marcados por las dirigencias nacional y estatal de Morena, en torno a la expedición de la convocatoria que abrirá el registro de precandidatos y la realización de la encuesta de la cual emergerá el abanderado o la abanderada al cargo hoy ocupado por Cuauhtémoc Blanco Bravo.
Y confirmó lo que anticipé hace unos días en esta columna respecto a la paridad de género aplicable a la postulación de mujeres como candidatas a gobernadoras en al menos cinco de los nueve estados donde, en 2024, se renovarán las gubernaturas.
Me parece, pues, que Morena podría tener candidata a la titularidad del Poder Ejecutivo morelense, aunque todo puede suceder con relación a la aplicación del acuerdo INE/CG583/2022 del Consejo General del Instituto Nacional Electoral, con fecha 20 de julio de 2022, que ordenó a los partidos adecuar sus Documentos Básicos e incluir los criterios mínimos señalados en las sentencias dictadas por la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) en algunos juicios de la ciudadanía tendientes a garantizar la paridad de género a partir del próximo proceso electoral para gubernaturas en que participen, ya sea de manera individual, en coalición o candidatura común. Esos procesos serán el año próximo en Coahuila y el Estado de México, donde podríamos ver a un hombre y a una mujer como candidatos a la gubernatura. Los mismos criterios deberán regir en los comicios de 2024, cuando estén en juego nueve gubernaturas.
Existen varios antecedentes tocante al avance y posicionamiento de la mujer en el ámbito político. Se ha generado paulatinamente y se refleja sobre todo en la integración de los Congresos estatales y de la Unión, pero hay un déficit en términos de paridad en lo concerniente al Poder Ejecutivo de entidades federativas. Desde 1953, año en que se reconoció en nuestro país el derecho de las mujeres a votar y ser votadas, se han elegido 372 gobernadores y gobernadoras, incluyendo a los electos en 2022; sin embargo, solo el cuatro por ciento han sido mujeres. La mayoría de estados del país, es decir 19, jamás han tenido una mujer como titular del Poder Ejecutivo. Es el caso de Morelos.
Tanto en el INE como en el TEPJF existen suficientes antecedentes jurídicos y sentencias para garantizar la paridad sustantiva. No voy a transcribir números de expedientes y casos, pero sí puedo asegurar que los acuerdos del INE están fundamentados constitucionalmente. Todos han sido confirmados por el TEPJF.
El 30 de marzo de 2022 la Sala Superior del TEPJF, al resolver el expediente SUP-JDC-91/2022, iniciado por Susana Harp Iturribarría, respecto al proceso interno de selección de candidaturas de Morena para la elección de gubernatura de Oaxaca, ordenó a todos los partidos políticos y al INE que a partir del próximo proceso electoral para gubernaturas “definan reglas claras en las que precisen como aplicarían la competitividad en la postulación de mujeres a las candidaturas a gubernaturas, y al segundo supervisar que se emitan tales reglas y verificar que, en los registros de sus candidaturas se cumplan”.
El 20 de abril de 2022, el Pleno de la Sala Superior del TEPJF en el expediente SUP-JDC-434/2022, instaurado por Maki Esther Ortiz Domínguez, relativo al proceso de selección de candidaturas de Morena para la gubernatura de Tamaulipas, estableció que a partir de la próxima elección de gubernaturas se definan reglas claras en las que precisen como aplicarían la competitividad en la postulación de mujeres a sus candidaturas.
En este sentido, para 2023, al haber solamente dos gubernaturas en juego, Coahuila y Estado de México, en una los partidos deberán postular a una persona del género femenino y en la otra a una persona del género masculino. Sin embargo, en 2024, al haber elección para nueve gubernaturas, tendrá que buscarse el número más cercano a la paridad, es decir 5-4, y con el nuevo requisito de la paridad sustantiva que implica contemplar el requisito de la competitividad, definido en los estatutos de los partidos desde octubre del presente año y con convocatorias emitidas exclusivamente para mujeres donde así les corresponda.
A juzgar por lo declarado este martes por Ariadna Barrera Vázquez, la dama ya estudió “la paridad de género que viene”, y subrayó que, de nueve entidades, en cinco habrá candidata mujer a la gubernatura. Obvio: vislumbra incluido a Morelos.
Repito: habrá que esperar todavía para conocer las decisiones que sobre este tema tan espinoso deberán asumir las dirigencias nacionales y estatales de los partidos políticos. De algo estoy seguro: si Morena postula a una mujer como candidata a la gubernatura, tendrá un carácter disruptivo e histórico. He de decirles que, igual a Morena, el resto de los partidos estarían obligados a postular a mujeres al cargo que hoy ocupa Cuauhtémoc Blanco Bravo. A ver.