El libro “GENERAL FELIPE ÁNGELES, SU GLORIFICACIÓN”, en primera reimpresión o segunda edición, como lo apunta el diputado, Rubén Moreira Valdez, uno de los tres autores de la obra: “el texto es un necesario rescate de esta joya publicada en 1944 y en la cual se da cuenta del traslado de los restos mortales de Ángeles a su estado natal” para luego agregar: “El lector seguro se llenará de emoción al conocer el esfuerzo de familiares, amigos, compañeros de armas y autoridades, para lograr que el distinguido hijo de Hidalgo, descansara en la tierra que lo vio nacer.
Esa emoción la sentimos todos los asistentes a la presentación de la obra el pasado jueves 13 en nuestra insigne Academia Nacional de Historia y Geografía, ANHG, patrocinada por la Universidad Nacional Autónoma de México, UNAM, acto tutelado por nuestra presidenta, maestra Elizabeth Rembis Rubio, exacto en el año en que estamos celebrando el Primer Centenario de nuestra ilustre y noble cofradía.
En este libro se describe cómo se saldó, continúa Moreira, “la deuda histórica de México con aquel hombre de armas que entregó su vida por el país”. Después refiere que conoce el expediente del juicio que concluyó con la sentencia de muerte del prócer y rescata las palabras del sentenciado a su abogado defensor: “Bueno quiero que vaya a México y le diga al señor Carranza… ¡pero dígaselo, licenciado… Dígale que no le perdono el crimen que ha cometido conmigo, que no lo siento por mí, sino por mi mujer y mis hijos, que por su capricho, va a quedar una viuda y unos huérfanos desamparados; pero dígale: !QUE ES EL DESEO DE UN MUERTO, QUE EL QUE A HIERRO MATA A HIERRO MUERE”.
Y concluye, por cierto: “Carranza murió meses después, traicionado por sus subalternos”.
En la obra cumbre de mi primo, Jesús Sotelo Inclán, “Raíz y Razón de Zapata”, que es toda una investigación histórica y me atrevo a decir periodística, relata las vicisitudes que tuvo que vencer para ganar la confianza de los de Anenecuilco y le presentaron en un jacalito de carrizo a “un hombre secreto”, quien le mostró, con gran sigilo una caja de hoja de lata de la que fue sacando papeles viejos.
“Me los encargó ‘Miliano antes de irse, por estos hizo la guerra a Díaz y peleó contra Madero, Huertas, y Carranza’ dijo franco… Fuimos a luchar en la Revolución y sólo hasta después de que él murió nos hicieron caso. ¡Pobrecito, a él no le tocó ver el resultado de lo que tanto peleó”, es decir el reparto de tierras y la liquidación de los latifundios esclavistas, por eso también ofrendó su vida, Felipe Ángeles, al lado del otro mártir, su jefe, Francisco, “Pancho” Villa!
Otro de los autores de la obra, Marco Antonio Mendoza Bustamante, en frase lapidaria, afirma: “Felipe Ángeles, gran estratega, genio militar, hombre preparado, fiero combatiente, íntegro, idealista y valiente… No murió en combate porque las sombras que amenazaban la libertad y nuestros derechos decidieron silenciarlo, de la misma manera que cien años antes, silenciaron al Padre de la Patria don Miguel Hidalgo”.
La siguiente etapa de la Revolución, nos relatan en su obra, “Derecha” Álvaro Delgado Gómez y Alejandro Páez Varela, “se inició con el derrocamiento de Huerta a la llegada de Venustiano Carranza a la presidencia, pero Carranza no supo o no quiso alinear sus intereses con Francisco Villa y con Emiliano Zapata, y la inestabilidad política y la agitación social aceleraron desenlaces violentos y la quiebra básica del país”.
“Las acciones de los mártires fecundan las buenas causas, así la Fundación general Felipe Ángeles se compromete a preservar la memoria, vida y valores del general para que las nuevas generaciones crezcan en un ambiente de amor, armonía y respeto para que logren desarrollarse, finalmente dijo César C. Ángeles, presidente de la Fundación General Felipe Ángeles, A. C.
Así fue esta etapa cruenta de la Revolución Mexicana, de ideales, de hechos heroicos y por desgracia de traiciones a la causa que la engendraron, de venganzas y de asesinatos, que dejaron como legado para el futuro mártires de grandeza como Ángeles, Villa y Zapata.
Por cierto, la nueva base aérea de la ciudad del centro del país se le designó: “Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles”, AIFA.
Periodista y escritor; presidente del Colegio Nacional de Licenciados en Periodismo, CONALIPE; secretario de Desarrollo Social de la Federación Latinoamericana de Periodistas, FELAP; presidente fundador y vitalicio honorario de la Federación de Asociaciones de Periodistas Mexicanos, FAPERMEX, miembro del Consejo Consultivo permanente del Club Primera Plana, Doctor Honoris Causa por la Universidad Internacional y Académico de Número y director de Comunicación Social de la Academia Nacional de Historia y Geografía, ANHG. Agradeceré sus comentarios y críticas en teodororenteriaa@gmail.com Nos escuchamos en las frecuencias en toda la República de Libertas Radio. Le invitamos a visitar: www.felap.info, www.ciap-felap.org, www.fapermex.org y el portal: irradianoticias.com