Este 20 de noviembre se publicó en el Diario Oficial de la Federación (DOF) el decreto por el que el presidente Andrés Manuel López Obrador declara como prioritario para el desarrollo de México la prestación del servicio público de transporte ferroviario de pasajeros.
El garrotero Macuspano dando respuesta a los empresarios del sector ferroviario que dudan de la rentabilidad del servicio de pasajeros, los ha invitado a aprovechar esa oportunidad comercial, pero, si no les complace, el propio Estado se hará cargo del asunto, ratificando que «de una u otra manera» habrá servicio de pasajeros.
O sea que “haiga sido como haiga sido” volveremos a tener los trenes del Teatro Fantástico el del Chocolate Express, los trenes de la infancia y los que recorrían nuevos paisajes en la juventud, los del antiguo Oeste compitiendo con el galopar de los cuacos, el de Doctor Zhivago, el de Indiana Jones, el de París a Estambul de Agatha Christie, el Transiberiano, el Tren crono nauta de Volver al Futuro, el de México a Cuernavaca terminando en Río Balsas y el de Cuautla.
Muchos argumentos mercadotécnicos, de técnica de Ingeniería ferroviaria, financieros han querido ser desvirtuados con infantiles o viscerales tesis como: sale costoso circular en auto por las autopistas de México, a veces las casetas de cobro atoran el tráfico desde kilómetros atrás, recordamos la de Tlalpan, la de Tepotzotlán y la de Puebla en cualquier fecha de vacaciones o puente largo. Atorones por Accidentes, manifestaciones, protestas, tiempo perdido, un viaje de la capital a Puebla puede robar medio sábado, asaltos en las filas o en despoblado. Argumento valedero pero la causa radica en las autoridades que no automatizan los servicios ni dan seguridad como antes que estaba el Federal que te mordía por ir rápido pero que inhibía a los maleantes, eran canijos pero útiles.
Argumentos que también aplican a los trenes, basta recordar los bloqueos a 129 convoyes de Ferromex en las vías de ferrocarril de Michoacán. O las detenciones de “la bestia” en el sureste originadas por miles de migrantes los que, ahora pedirían viajar de aventón en un cómodo tren de pasajeros.
Viajar en autobuses es por demás incomodo, asientos muy cercanos que no se pueden reclinar para descansar en trayectos largos, o bien venir alumbrados por la televisión del pasajero de al lado y, aguas con que éste sea doble ancho porque se arruinó el viaje. La inseguridad que priva en los autobuses es constante.
Soslayan los promotores de los nuevos Ferrocarriles Nacionales de México que las empresas transportistas de pasajeros del país, cada día se han esforzado por brindar más comodidad y seguridad al viajero. Hay autobuses supercómodos de doble piso y plena seguridad al viajar con un costo muy accesible a cambio del servicio brindado.
Viajar en Avión es un tema por demás preferente y se refiere a aquellos pasajeros que tienen el recurso, la oportunidad o la necesidad de ese servicio con la cualidad de ser seguro en cuanto a los asaltos. Pero los promotores se hacen ignorantes que para el usuario de los aviones lo hace en factor de su economía.
Lo que es cierto, que el fentanílico sueño de Andrés Manuel, es un sueño que todos los que hemos viajado en tren, en largos trayectos, también lo tenemos, sin el agregado opioide, si con la añoranza de su gran comodidad.
El Sistema Ferroviario Mexicano de no ser aceptado por la iniciativa privada, requiere de muchos estudios, tiempo y mucho dinero. La infraestructura actual está construida para la cubertura de las necesidades que el sector alimentario, industrial y agrícola tienen.
No basta con dejar a la próxima presidenta el proyecto, posiblemente la concesión y los términos para el inicio de operaciones, para decidir el 15 de enero, hay que empezar a trabajar, mejorar las vías, electrificar, disponer de subestaciones eléctricas que puedan suministrar el fluido sin necesidad de castigar a los demás, construir las estaciones ferroviarias, etcétera. Se requiere de estudios de rentabilidad de rutas, costos de inversión, de operación, de pasajes. Capacitación de todo, todo el personal que lo operará, ya veo al sargento de órdenes vestido de Porter checando los boletos a los pasajeros.
Son casi 25 mil kms de vías férreas, las que están controladas por el CTC, Sistema de control de tráfico Centralizado. Vías que para ser ocupadas por trenes de pasajeros se deberán incorporar y sujetarse a una regulación de tiempos y frecuencias, permitiendo realizar diferentes acciones de control y accionamiento remotamente de los diferentes elementos que conforman una línea férrea como son señales y desvíos, ordenando los movimientos de los trenes dentro de la circulación
¿Quién lo operará? FERROMEX, KANSAS O FERROSUR no creo que la SEDENA tenga la capacitación para hacerlo. Si en el aire que hay millones de rutas definidas y emergentes han caído en riesgo de colisiones, ¿qué se puede esperar?, sabemos que ellos son fregones, pero … administrar y controlar todo un sistema tan complejo como es el ferroviario, requiere de profesionales y experimentados operadores.
El trazo de las rutas será en su mayoría novedoso. Las que se dejaron de usar ya no existen, ahora o han sido invadidas o se usaron como vías vehiculares. Ya no sé recurrirá a prolongadas rutas de evasión de obstáculos, montañas o barrancos, hoy se usarán puentes y túneles para acercar los puntos de origen y destino. Esas obras son altamente costosas.
El Midas Tabasqueño tendrá que recurrir a la cancelación de otras instituciones para usar los fideicomisos y financiar este innecesario pero caprichoso proyecto. Ahí está PEMEX con sus inoperantes plantas de refinación, su desaparición no afecta en nada, al contrario, se acaba la mayor sanguijuela y prestanombres de la Cuarta T.
Me pregunto ¿saliendo de la CdMx la terminal estará en Buena Vista o en el Campo Militar Número Uno?
¡Amigos les dejo como siempre un saludo con mucho afecto!