* Su jefe asegura que se autorealizó el procedimiento y la acusó de abuso de confianza
* Feministas critican al médico por su postura insensible y patriarcal
* Sin percatarse de que el móvil se mantuvo encendido llamo “hija de la chingada” a la recién fallecida
Una enfermera falleció mientras se sometía a una liposucción abdominal en una clínica estética de Cuernavaca; el propietario del establecimiento inmediatamente se apresuró a asegurar que su trabajadora se autorealizó el procedimiento y la acusó de abuso de confianza.
Los hechos ocurrieron esta mañana en una clínica, situada en la colonia Reforma en la capital de Morelos.
Se trata de Carina , una enfermera de 32 años, que aparentemente trabajaba en la citada clínica y mientras estaba en el procedimiento le habría dado un paro cardiorrespiratorio.
Al lugar llegó personal de urgencias médicas, quienes confirmaron el fallecimiento de la enfermera y posteriormente arribó personal de Servicio Médico Forense (SEMEFO).
Unas horas después fue difundido por redes sociales un video en donde el doctor Rolando E. Samper Mendoza, propietario de la clínica, informó -desde la ciudad de Guadalajara, Jalisco, debido a que se encuentra participando en el Congreso Internacional de la AMCPER- lo siguiente:
“El día de hoy aproximadamente a las 12 me informaron que una de mis enfermeras de nombre Carina, sin mi autorización, ni permiso, con abuso de mi confianza decidió por su cuenta propia realizarse una «auto liposucción abdominal» con anestesia local y peor aún ni siquiera en quirófano sino en un consultorio”.
Agregó: “el resultado de esta acción incomprensible fue que falleció como consecuencia de absorción masiva de anestésico que ella misma se aplicó”.
Previo a finalizar el vídeo, se escucha decir al médico Samper Mendoza «que desmadre se armó» para luego referirse a la enfermera sin vida como “hija de la chingada».
Feministas consultadas cuestionaron el proceder insensible y patriarcal por parte del dueño de la clínica.
“En primer lugar las decisiones sobre el cuerpo son única y exclusivamente de la mujer, no tiene por qué pedir permiso. Mi cuerpo es mío y solo mío. Pero que salga este médico a dar una explicación con esa rapidez y a afirmar que fue una auto liposucción y acusarla de abuso de confianza, no solo se presta a la sospecha, sino que es una enorme falta de respeto”, sostuvo, Adriana Mujica, integrante del Programa Interdisciplinario de Investigación Acción Feminista (PIAFF) y feminista.
En este contexto, llamó a la Fiscalía General del Estado de Morelos (FGE) a investigar este fallecimiento con Protocolo de Perspectiva de Género.
“Solicitamos a la fiscalía que este fallecimiento se investigue a fondo y con perspectiva de género”, dijo.
El médico y propietario de la clínica no se percató que su teléfono móvil permaneció encendido y al finalizar su grabación, se percibe una voz femenina, a quien le dice “qué desmadre se armó… hija de la chingada”, en clara alusión a la enfermera fallecida.