A la llamada clase política mexicana, tanto de la vieja como de la nueva mafia del poder, molesta mucho que sus acciones ilegales sean señaladas, ya sea al interior del país o por observadores extranjeros. Cuando dichos señalamientos provienen de fuera, de inmediato aducen el principio de la no intervención y la autodeterminación de los pueblos, emerge su nacionalismo patriotero. En ese sentido, los gobiernos de Izquierdas y derechas de los últimos 90 años se han empeñado en mostrar una realidad maquillada al mundo o de plano mentir para mantener una imagen muy distante de las crudas realidades nacionales.
Ya estando en el poder Morena, el partido del presidente Andrés Manuel López Obrador, sus primeras elecciones federales intermedias, concurrentes con algunos procesos electorales locales, de 2021, resultaron las más violentas de toda historia. Rebasaron y sustituyeron con creces a los cacicazgos tradicionales. Ahora fueron diferentes grupos criminales los responsables de la presión y la violencia.
La vergüenza, palabra que parece no existir en el diccionario cuatritransformista, que deberían sentir los morenistas por la utilización clientelar y electorera de los programas sociales, aprendida del PRI y perfeccionada ideológicamente por López Obrador, palidece frente a los 27 asesinatos de candidatos, los levantones de equipos de campaña, a veces equipos completos, las amenazas, directas o indirectas, y el llenado de urnas y actas a punta de pistola. Sucesos que se produjeron en la mayor parte del país, pero entre los que destacan los casos que fueron ventilados en algunas publicaciones de la prensa nacional y en la denuncia que presentó la coalición opositora del PAN-PRI-PRD ante la Organización de Estados Americanos (OEA) y la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
Durante el proceso electoral y el mismo día de las elecciones se han documentado actos tales como el levantamiento de candidatos y sus equipos, que soltaron al cerrar las casillas, en Sinaloa. Nueve homicidios de candidatos en Veracruz. Comandos armados, en siete municipios de Michoacán, que ejercieron violencia sobre los funcionarios de casilla y hasta ellos mismos rellenaron urnas y actas. Ni qué decir de las comunidades que en Guerrero fueron inducidas a votar por los candidatos aprobados por los cárteles y las amenazas de muerte a diversos postulados en el Estado de México. Aún después de las tomas de posesión ha seguido la violencia. Ahí tienen los casos de Veracruz y el condenable asesinato del presidente del municipio indígena de Xoxocotla, Benjamín López Palacios, perpetrado por un comando armado al interior de su domicilio.
Lo sucedido en México en las elecciones del 2021 se asemeja mucho a la intromisión del crimen organizado en el fraude de 1988, cuando la caída del sistema, orquestada por Manuel Barttlet Díaz, hoy consentido y protegido de AMLO, permitió la llegada al poder de Carlos Salinas de Gortari, con la diferencia de que ahora no se trataba de hacer ganar a un candidato, sino a los que designara la delincuencia organizada.
Falta tiempo, pero si esto no se remedia, no podemos esperar nada bueno para las elecciones de Estado del 2024. Ah, claro, Andrés Manuel tuvo otros datos. Minimizó los actos de violencia, dijo que “la gente se portó muy bien, los que pertenecen a la delincuencia organizada en general bien, muy pocos actos de violencia de estos grupos”. ¿A usted le parece, como a AMLO, que todo esto está bien?
Y para iniciados
En medio de la emergencia económica y la tragedia sanitaria que viven México y Morelos, las iniciativas para reactivar las actividades productivas y comerciales deben ser apoyadas, reconocidas y promovidas. Mucho ojo amigos productores y exportadores de aguacate, particularmente los de Buena Vista del Monte, en el municipio de Cuernavaca que, con su trabajo, al producir alrededor de 159 toneladas anuales, son quienes más contribuyen a que la entidad sea la cuarta mayor exportadora de aguacate en el país, pues la Secretaría Desarrollo Económico y Turismo brindará un fuerte impuso a sus actividades productivas y comerciales. Aprovechen esta valiosa oportunidad, así como la disposición y experiencia de su titular, Humberto Paladino Valdovinos.
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