“¡No hagas daño a un periodista, porque lo pagarás toda la vida!”.
Ya que estamos en los días de la Pascua de Diciembre que se prolongará hasta principios de enero y contempla entre sus fechas lo de Santa Claus y los Reyes Magos, debo referir como buen recuerdo para mis buenos lectores, aquello que en algunos casos como el mío es vigente por lo del ‘Cochinito’… Desde temprana edad, cada uno de los longevos que lo practicamos tuvimos nuestra alcancía que bien podía ser una cajita de cualesquiera tipo de materiales como cartón con una pequeña ranura en su tapa; una botella o frasco, un bote que podía tener también su tapa ranurada o algún otro tipo de depósito donde a diario o periódicamente le metíamos nuestras moneditas y en no pocos casos, nuestro billetito pues no importaba la denominación, sino aprender y entender que el hábito del ahorro es sumamente importante para los humanos pues no sabemos en qué momento podamos necesitar algún recurso que puede salir de lo ahorrado en nuestra alcancía o lo podemos tener de reserva para disfrutarlo… Aparte de aquellas rústicas alcancías, con el paso de los años vinieron las artesanales hechas de distintos materiales y tamaños con la representación de diversos animales y también de algunos humanos reales o de ficción… Entre todas estas alcancías la más famosa es y por eso casi así se les llama a todas el “Cochinito o Marranito”, famosas por sus colores y decoraciones… Pasadas las semanas y meses, para los ahorradores en el cochinito y las otras alcancías, la ansiedad tenía su efervescencia para abrir ese depósito de nuestras ‘lanitas’… Había quienes en su desesperación por ver el contenido, ‘iban romper el cochinito’ y así rasgaban, quebraban o rompían a como diera lugar la alcancía; otros con más cuidado solamente le hacían un hoyito para sacar poco a poco lo ahorrado… Desilusión y tristeza causaba entre algunos de ‘los ahorradores´ el hecho de que al abrir su ‘cochinito’ o alcancía algún ducho o vivales “se les había adelantado” y como dice el argot popular “ya se los habían ordeñado”, no así entre quienes con mucho cuidado sacaban su dinerito y se llevaban la grata sorpresa por lo poco, mucho y muy bueno que ahí habían guardado… ¡Qué grato era abrir el cochinito o la alcancía tanto en lo solitario, pero más entre los cercanos de confianza para que vieran ese ‘guardadito o guardadote’… Este mes de diciembre luego de meterle a nuestro cochinito mi Esposa Lau y Yo diez pesitos diario cada uno o algo más, nos encontramos con la grata sorpresa que nos vino a alegrar la Pascua de Diciembre para ver y tener en mano todo nuestro ‘ahorrito’, poder disfrutarlo y hasta en parte compartirlo… Sugerencia, haga o compre su alcancía y al mismo tiempo el propósito de meterle una monedita o un billetito diariamente; ya verá que sorpresa y satisfacción tendrá con el paso de los meses… ¡Feliz Nochebuena, Navidad, Año Nuevo y Santos Reyes…! Después de haber disfrutado bien y en grande todo lo que nos regala el mes de diciembre por los buenos propósitos que multiplicadamente recibimos, mismos que generalmente arrancan poco antes del 12 de diciembre Guadalupano, para llegar al inicio del periodo vacacional de los espacios de educación y enseñanza junto con los gubernamentales, lo cual se aúna con las tradicionales Posadas y desde luego el “Día de los Inocentes” por el cual debemos tener nuestros cuidados… ¡Ahí la dejamos…! ¡Felicidades! ¡Hasta mañana que será un día más!
