• La gimnasia no es lo mismo que la magnesia
Por: Alejandro Cárdenas.
Cuando una historia o afirmación resulta difícil de creer debido a su falta de fundamento o lógica, se aplica sin dudar la expresión “Cuento Chino” y esto porque hace muchos años -antes de internet- la percepción que se tenía en Occidente hacia las historias provenientes de China, se consideraban exageradas, fantasiosas y poco fiables, y por eso, mencionar en la calle que México esboza una dictadura, es mero Cuento Chino.
Una dictadura tiene marcadas características, por ejemplo; la concentración del poder, represión y violencia, manipulaciones electorales, censura y control mediático, persecución política, economía dirigida por el Estado y en México no hay algo que tenga este tufo por lo menos. Es un mero Cuento Chino.
En un país con dictadura, sobre sale la cabeza de un dirigente megalómano y para entender qué es eso, es necesario decir que la megalomanía es un trastorno psicológico caracterizado por una excesiva autoestima, delirios de grandeza y la creencia de que se tiene un poder o talento extraordinario, presentan síntomas como la necesidad constante de ser reconocidos y admirados, así como una falta total de empatía hacia los demás, menosprecian e ignorar las opiniones y sentimientos de los demás. O sea, un megalómano, tienden a buscar constantemente situaciones en las cuales pueda sobresalir y obtener reconocimiento público. Aquí, en México no hay nada de eso. Otro mero Cuento Chino.
En una dictadura, la única organización política permitida suele ser el partido político del régimen. Ese partido tiene un control absoluto sobre todas las instituciones y toma todas las decisiones de manera unilateral. La oposición no está permitida y cualquier intento de formar otro partido político o expresar opiniones contrarias al régimen puede llevar a la persecución, encarcelamiento e incluso tortura de los disidentes. En una dictadura, el papel del partido político consiste en apoyar y promover la ideología del líder y así garantizar su permanencia en el Poder y en México lo que sobran son partidos políticos y son jugosos negocios, incluso de familia. ¿Dictadura en México? Otra vez, un mero Cuento Chino.
La forma de organización política de México, es la de una República representativa, democrática, federal, compuesta de Estados libres y soberanos en todo lo concerniente a su régimen interior, pero unidos en una federación y su sistema político se basa en una Constitución que establece la separación de poderes entre el Ejecutivo, Legislativo y Judicial.
El Poder Ejecutivo está encabezado por el presidente, quien es elegido mediante elecciones cada seis años. Este poder es responsable de administrar el país y hacer cumplir las leyes.
El Poder Legislativo está compuesto por dos cámaras: la Cámara de Diputados y la Cámara de Senadores. Estas cámaras son responsables de aprobar leyes, presupuestos e investigaciones parlamentarias.
El Poder Judicial tiene a su cargo interpretar las leyes y asegurar que se cumplan correctamente. Está conformado principalmente por la Suprema Corte de Justicia, jueces federales y locales.
Además del gobierno federal, existe un gobierno estatal en cada uno los 32 estados mexicanos con sus propias estructuras políticas similares al nivel nacional.
Así que ¿cuál dictadura? esto es México, las dictaduras son dirigidas por militares luego de golpes de Estado y en América se cuentan en Argentina, Brasil, Chile, Guatemala, Perú… pero en México, no.
En la actualidad, por más semejanzas forzadas en las charlas de café y las calles, no hay que caer en Cuentos Chinos.
Para muchos ya parece, pero aún la gimnasia no es lo mismo que la magnesia.
