La violencia es uno de los actos que más dañan a la sociedad y que se haincrementado de manera acelerada. Existen diversos tipos de violencia, las cuales pueden ir desde la física, económica, psicológica o incluso sexual, siendo la últimade las citadas, uno de los tipos de violencia que inciden en la actualidad.
El Código Penal del Estado de Morelos contempla un capítulo entero denominado,delitos contra la libertad y el normal desarrollo psicosexual, el cual tipifica los ilícitos de esta materia, entre los cuales se encuentran la violación, la inseminación artificial sin consentimiento, el hostigamiento, acoso y ciber acoso sexual, el estupro, abuso sexual y el turismo sexual; todos ellos castigados con una pena corporal.
De acuerdo a datos del INEGI año dos mil veintidós, los delitos sexuales que másse denunciaron fueron el abuso sexual con un 53 por ciento del total y la violación con un 33 por ciento. Para mayor precisión, la violación se genera cuando una persona por medio de la violencia física o moral introduce su miembro viril, en persona de cualquier sexo. O en su caso, cuando el agente activo insertacualquier instrumento, vía vaginal o anal con fines lascivos o erótico-sexuales.
Así mismo, tenemos el abuso sexual, el cual se configura cuando un sujeto sin consentimiento de la persona y sin el propósito de llegar a la cópula, ejecuta en ella o el, un acto erótico sexual o la haga ejecutarlo. Entendiéndose a este tipo de actos, como besos, tocamientos o caricias encaminados a satisfacer los instintos lascivos del agresor.
Para enfatizar lo anterior, es necesario establecer que si bien, este tipo de actos pueden ser ejecutados en contra de cualquier persona, cierto es también que las victimas principales de los delitos sexuales son mujeres, niñas y niños. Esto es así, pues de acuerdo a la información recabada por la Organización Mexicana “Alumbra”, en 2021 se registraron 22 mil 410 casos documentados de violencia sexual en México y de ellos 18 mil 903 casos correspondieron a niñas y mujeres adolescentes; es decir, 84 por ciento de los casos involucra a este grupo social.
Las cifras son alarmantes, por lo que resulta sustancial y que con el propósito de hacer justicia, al valorar la comisión de este tipo de delitos, se debe de presumir la buena fe de la víctima, ello atendiendo a que al tratarse de un delito sexual, estos suelen cometerse en ausencia de testigos, por lo que es obligación del Juzgador no exija una prueba grafica del hecho, teniendo que conceder valor preponderante a lo denunciado, pues mientras no exista prueba que demuestre lo contrario, el umbral probatorio aun siendo bajo, resulta suficiente para sostener una sentencia de condena en contra del agresor sexual.
Por último, debemos dejar claro que este tipo de actos lesionan gravemente a la víctima y a la sociedad, por lo que durante el proceso legal, la problemática debe ser atendida con especial cuidado, evitando a toda costa la re victimización y una vez dictada la sentencia debe comprender, la garantía de que la víctima se encuentra en un entorno seguro, alejado de su agresor y sobre todo que se le brinden los medios necesarios, para poder cubrir las terapias psicológicas que reparen el daño emocional causado, así como la consecuencia del hecho ilícito vivido.