Aerolínea del Estado
Una vez más nos referiremos a la aviación. En esta ocasión el anuncio de la autorización de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público para el nacimiento de la empresa Aerolínea del Estado Mexicano y la reaparición del Avión Presidencial, que lo sigue siendo, dan para la reflexión.
Es de entenderse que el nacimiento de una empresa de estado dedicada a la aviación recibiría críticas aunque valdría la pena analizar varios temas en los que podría influir su presencia en ese rubro indispensable para el país. La quiebra de varias empresas, el incremento en las tarifas, el cobro pulverizado de los servicios, la carencia de rutas y de conectividad entre ciudades, aeropuertos sin operaciones, son entre otros, factores que podrían encontrar algún avance.
Es sabido que el gobierno federal acordó con los sindicatos de los trabajadores de Mexicana de Aviación la venta de la marca y un conjunto de bienes, el Centro de Centro de Adiestramiento Tripulaciones, dos edificios de oficinas: uno en Guadalajara, por 86 millones 171 mil pesos, y otro en Ciudad de México, por 28 millones 991 mil pesos. Asimismo se hizo del simulador Thompson y otro Singer A320.
Hacienda detalló las amplias facultades de la nueva empresa Aerolínea del Estado: podrá llevar a cabo todas las acciones necesarias para promover, explotar y prestar el servicio público de transporte aéreo regular nacional e internacional de pasajeros, carga, correo o una combinación de éstos, por cuenta propia o, a través de personas públicas o privadas.
Además promover, explotar y prestar el servicio público de transporte aéreo no regular nacional e internacional, en sus variantes de fletamento bajo la modalidad de paquete turístico o de traslado, charter y taxi aéreo, por cuenta propia o a través de personas públicas o privadas, así como aquellos servicios complementarios y conexos, además de obtener, bajo cualquier título, concesiones, permisos, licencias, autorizaciones y en general, ejecutar todos los actos necesarios para llevar a cabo su objeto social, de conformidad con sus Estatutos Sociales y demás disposiciones aplicables.
O sea… todo.
Lo deseable es que esta nueva alternativa ponga orden en la aviación en México, que la haga más accesible y se eche a andar todo el sistema aeroportuario que gasta millones en mantenimiento a pesar de estar sin operaciones comerciales o con un mínimo de vuelos registrados.
El Avión Presidencial
Con nostalgia muchos vieron la reaparición del Avión Presidencial, que lo sigue siendo pero ahora del gobierno de Emomali Rahmon, presidente de Tajikystan; este jueves aterrizó en la ciudad china de X’ian con su nuevo aspecto, bandera y matrícula.
Llama la atención que después del “sorteo” en el que nadie tuvo la suerte de llevárselo a su casa, ante el anuncio de la compra de Mexicana de Aviación, frente al nacimiento de la Aerolínea del Estado, no hay tenido un pequeño rincón para ser ocupado en esta nueva alternativa y sacarle provecho. La depreciación hizo que se vendiera en un bajo precio.