1.- La derecha sigue su ruta
2.- Deslindada de publicidad
3.- Ruvalcaba
4.- Educación
1.- La derecha sigue la ruta de desestabilización; si en las urnas no puede ganar, buscará los recursos para hacerlo con la presión social, por los mercenarios de la justicia, por los poderes fácticos y enviando carne de cañón a provocar, sabedora de que la izquierda no reprime, que prefiere aguantar el chaparrón que reaccionar ante las agresiones de estos grupos de mercenarios y algunos de buena fe; son los que van al frente; los jefes los envían al frente para que protejan a los que van por dinero, los que fabrican la anarquía.
Lo advertí, Bolsonaro no se quedó tranquilo, menos los fascistas; reaccionaron y van a seguir; van a encontrar recursos porque Lula y su partido tienen el gobierno, pero no el poder; éste es de los fascistas y lo van a utilizar; ahí el caso del Perú; incluso igual en el territorio brasileño, contra el propio actual presidente, y ahí también la destitución de Dilma Rousseff, todo “dentro” de la lay, la ley hecha por los potentados, por personeros de la oligarquía; ley que haga falta, ley que se hace, la que sobre, se elimina, que el caso es que todo se cuadre para bien de los jerarcas, y sucede en todas las partes del universo.
Lula sufrió el primer embate y vendrán otros, la derecha no se quedará en paz, se hará lo imposible para dar un golpe de estado, se está fraguando desde que se perdió, por lo que se han hecho las cosas de tal manera que van a atacar sobre cualquier resquicio.
Si no logra el objetivo, por lo menos querrá minar la resistencia, inestabilizar a quienes están en el poder, y si tienen a los poderes fácticos de su lado, la derecha los utilizará a todo lo que dan, en labor de zapa que suele darle resultado, siempre existen personas sin conciencia a las que es fácil manipular, en ocasiones ni siquiera es necesario el dinero, es convencerlas de que el presidente le lleva al comunismo; todavía funciona, más de lo que se espera, es los fantasmas a los cuales no se les comprende y se le trae a menudo.
Lo veremos ante las primeras medidas que quiera poner en práctica el gobierno, se le tachará de ello, sin analizar primero si la suerte es positiva o no.
Los poderes fácticos hacen su labor, machacan todo, van con un objetivo, las mentiras cuando se reiteran, surgen como si fueran verdad. Se debe estar atento a lo que suceda en Brasil, para que no se sufra un golpe de estado como en Bolivia o en Perú; en el primer país, el pueblo regresó para triunfar y meter a la cárcel a los golpistas, pero en el otro, se está en la cúspide de la derecha, mientras que el pueblo se encuentra en la calle.
Lula no reprimirá a su pueblo, pero sí debe investigar quiénes están detrás de este caos, el que no se puede tolerar porque vendrán otros; la derecha llama a la prudencia de otro modo; no se le dé espacio, que se busque a los responsables y que paguen con cárcel el pretender desestabilizar a un gobierno legalmente electo, pero al imperialismo le afecta.
Esto igual se da porque el pueblo no se decidió a votar en masa por la izquierda; cuando lo hace, como en México, ni la derecha ni los poderes fácticos, pueden con el gobierno.
Es la lección que se debe atender en cualquiera de las elecciones de aquí en adelante; no dar espacio a los retrógradas porque lo aprovechan y siembran caos; vean a Morelos con el caso del congreso, al servicio de la derecha y del perverso. “Díganme gobernador”.
2.- Margarita González se deslindó de los carteles, pintas y demás tanto circulan; fue al lado de un notario, por lo que queda a salvo de la campaña adelantada. Los que están con ella, esperen, los que están contra ella, están al descubierto; no se podrán ocultar.
3.- Resulta que Guillermo Ruvalcaba, enemigo jurado de Rabín, ayer estuvo friega y friega a favor del amigo de Agustín Alonso, que porque acudió a un informe de alcalde. Ahora ama a Rabín, ¿por sí o por órdenes de su patrón?. Tenía otro concepto de él.
4.- Se reinicia el trabajo. En primarias a los profes el equipo de la dirección los dejó solos. Como está el nivel de la mayoría de funcionarios de ahí, fue “más mejor”, pa’ que me entiendan, no vaya a ser que terminen por hacer más bolas el engrudo. Mejor que sigan admirando sus títulos de doctor y que no hablen para no quedar en evidencia.
