1.- ¡G8, la dignidad!
2.- Parlamento
3.- Urióstegui
4.- Los despidos de trabajadores
1.- La dignidad que mostraron los integrantes del grupo de los Ocho es lo que está entregando resultados; no es una graciosa dádiva por parte del jefe del grupo de los doce (al parecer algunos ya no quieren estar en esta polarización, desean dialogar con todas las fuerzas políticas de la entidad, no estar más bajo la férula de un cacicazgo perverso).
Esta dignidad de los Ocho fue lo que dio pie a abrir la puerta a quienes siempre tuvieron la razón por encima de las imposiciones de quienes son los responsables de la parálisis legislativa en el congreso, sin embargo, habrá que analizar los términos en los cuales se da la apertura. Quien fue perverso, lo es, por lo que a sentarse a dialogar con la justicia en una mano y la ley en la otra, en el entendido de que un principio de la dignidad es la defensa de los derechos; no claudicar porque si no se lucha por lo propio, no se podrá hacerlo por los derechos del pueblo, y legislar para el pueblo es pensar en sus derechos.
Excelente la postura de los Ocho.
Pese a que fueron agraviados con actitudes soeces, misóginas, de hecho y de palabra, ante la posibilidad de apertura, con el pueblo por testigo y aliciente, Tania Valentina, Paola Cruz, Mirna Zavala, Edi Margarita, Ariadna Barrera, Érika Hernández, Macrina Vallejo y Alejandro Martínez en total disposición de seguir con su trabajo; no dejaron de hacerlo; hay testimonios reales de que su labor no dejó de hacerse pese a no recibir sueldos, prestaciones, prerrogativas ni contar con personal, porque les corrieron a todos, como una de las formas más bárbaras de actuar, pues no sólo se atentó contra los 8, sino contra decenas de trabajadores a quienes dejaron sin dinero qué llevar a su casa.
Se muestra una foto: Paola, Tania Valentina, Mirna y Érika están en reunión de la Junta Política con total disposición para trabajar. Las ofensas no se olvidan, el pueblo, menos, al multicitado grupo; de hecho siguieron sus gestiones, foros y respaldos a sus conciudadanos, quienes están conscientes de que este avance es de la resistencia y la dignidad de estos ocho legisladores, a quienes se les daban ocho días para regresar con la rendición en las manos, casi de rodillas, públicamente, aceptando órdenes del patrón, con ello se hubiera dejado al estado en el caos, a merced de los oscuros… intereses.
El que fue perverso, lo es; quienes, dignos fueron, lo serán. El pueblo puede tener total confianza en ellos; piensan en Morelos y no aceptan la apertura para ser subordinados.
Por otro lado, hay voces que suenan independientes dentro del grupo de los 12. Quien se dio a la tarea de reconocer a Paola fue Óscar Cano, desde luego que con permiso de sus patrones, y luego otros, por imitación, por cálculo político, tan precario como grotesco.
Los ocho, ante esta apertura, se mostraron serenos, ecuánimes, con altura de miras; no hubo triunfalismos sino la intención de trabajar en sinergia con el pueblo; siempre en el marco de la dignidad que se exhibió en estos cuatro meses y medio.
París bien vale una misa.
“Mi pan lo comí entre batallas, me acosté a dormir entre asesinos”, dicta Bertolt Brecht en su poema A los que nazcan más tarde.
“Quien quiere nacer tiene que romper un mundo”, escribe Hermann Hesse en el Demian.
La razón, los perversos pretenden esconderla; olvidan que es más brillante que el sol; nadie puede ocultarle, menos la perversidad. La razón viene de la mano de la justicia.
2.- Parlamento de los niños en el Tribunal Superior de Justicia. Chabelo Téllez no hizo nada para respaldar el evento. No se le pueden pedir peras al olmo.
3.- Urióstegui se lanza contra ciertas personas de Ocotepec, sube el predial y hoy habrá una manifestación sobre el particular. La buena, apoya el parlamento infantil del TSJ.
4.- Los despidos de los trabajadores no se olvidan. Ya se están tomando cartas en el asunto en el gobierno estatal. Que se revisen los casos. Insisto, los aviadores fuera, sin contemplaciones, los deshonestos y los corruptos, no los eficientes.
