1.- La atención a víctimas
2.- Otro candil
3.- ¿Prensa?
4.- La disciplina partidaria
1.- En la Comisión Ejecutiva de Atención y Reparación a Víctimas del Estado de Morelos llegó Paloma Picazo Hernández, quien sustituyó a la decepcionante señorita Carranco, quien presidió la comisión que mereció, de parte de la esposas del gobernador, Graco Ramírez, Elena Cepeda, crítica por los sueldos que recibían.
Se fue más allá. Eva Paloma presentó denuncia, porque presuntamente se pedía tajada a las víctimas para que se acelerara su proceso de entrega del recurso por la agresión sufrida, y que merecían la atención en el mejor de los términos, para aliviar en algo lo padecido, pero faltó sensibilidad y pudo sobrar la ambición de algunas de las integrantes de este organismo, lo que se debe reparar por la nueva titular, y, al parecer, se va en ese sendero con los recursos que se tienen, y que no son ni serán suficientes por la tanta violencia que se padece en esta tierra zapatista.
La señorita Picazo tiene por delante un trabajo titánico, difícil, donde debe tratar a las víctimas como tales, a quienes es imposible devolverles la tranquilidad, nunca al ser querido, ni a la vida antes de la tragedia, pero en algo se puede aliviar el gran dolor que no dejará de sentirse así pasen mil años, puesto que la violencia arrebató la tranquilidad de un segundo para el otro.
Ver salir a quien quieres, lleno de energía, vitalidad, sueños, y unas horas más tarde enterarte que no regresará por esa puerta caminando, que a sus pocos años alguien en la cobarde oscuridad o circunstancias de estar en el lugar y hora equivocada, le cegó la vida. No le verás terminar sus estudios o seguir trabajando para sacar adelante a su familia. Alguien le asesinó o intentó hacerlo y le dejó secuelas para la eternidad.
Usted, Paloma, tiene en sus manos el poder de aligerar esta lápida que se vino encima, cuando unas horas antes le vieron salir con un “ahora regreso, voy a trabajar (o estudiar)”, y nunca más le escucharán. Se fue para siempre y dejo un vacío eterno.
Hizo bien en presentar la denuncia, que nadie quede impune, y si es Carranco quien debe ser juzgada adelante. Sólo puedo decir que fue decepcionante, que la luchadora social la guardó pronto, quizá hasta se avergonzaba de ella, para que surgiera toda la intolerancia de que es posible, y entonces sale la verdad, que su lucha fue para llegar a un cargo, pero estando en él, se le olvidó, quizá contagiada por el gobierno graquista, pero no hay pretextos, y menos si se cobraba una lanita a las víctimas por agilizar los trámites, lo que es de canallas. Por acciones como éstas el perredismo llegó a las cloacas
Señorita Paloma, deseo que entienda el papel trascendente que tiene en su vida, por lo que debe cumplir con honor, dignidad y consideración su encargo, sentir el dolor de las víctimas, la desesperación de los tantos trámites obscenos que se deben padecer para acceder a la reparación del daño, y no es tal, es sólo un concepto, pero usted le debe dar vida, misericordia y esperanza; un poco de la tanta luz que se apagó al morir las víctimas.
Le deseamos éxito. Será en cada uno de los respaldos que entregue a familiares de las víctimas; trabaje para ello, que quienes le acompañan, entiendan igual que usted que su trabajo es valiente y especial, que se le debe tener gran respeto, empatía de sentir el sufrimiento; les asesinaron al ser amado; desde entonces ni el sol calienta ni la sonrisa vuelve a ser lo franca y abierta que lo fue cuando se le vio salir. “Te amo, hijo”, y él (o ella) se volvió y lanzó un beso: “no te apures, no tardo y acabamos de ver la serie”…
2.- Pancho el de las fosas sale a pedir a las partes involucradas en el caso de la UAEM que pongan por delante el interés de la educación (¿Cómo el grupo de los 12 lo hace por Morelos?). Ciudadanía, aquí tienen a otro candil de la calle y oscuridad de su casa.
3.- Prensa sí, mercenarismo no. Ni un periodista asesinado más, pero que sean puestos al descubierto los indignos de estar en esta profesión.
4.- Ser parte de Morena es un privilegio, pero también una responsabilidad. Si no les gusta cómo está conduciendo Raúl Ojeda, declárense independientes a ver si ganan una elección nuevamente.