Con la clausura de tres tiendas departamentales por incumplir las normas sanitarias en plena emergencia de salud, los empacadores (en su mayoría adultos mayores) manifestaron su tristeza y desesperación, porque viven de las propinas que les otorgan los clientes.
Afuera de los locales están al pendiente de la reapertura de Costco y Mega Soriana ubicadas en la colonia Lomas de La Selva, así como en Chedraui en su tienda ubicada sobre el boulevard Cuauhnáhuac, en Cuernavaca.
La noche del pasado martes las departamentales antes referidas fueron clausuradas por permitir el paso de familias completas, mantener un aforo de clientes mayoral permitido y violar la sana distancia, entre otras disposiciones.
Los adultos mayores esperan la reapertura pronta de las tres tiendas departamentales “aunque sea para comprar un bolillo en la noche buena”, porque viven de las propinas de los clientes.