• El SAPAC ha cumplido con las medidas administrativas, técnicas y financieras para enfrentar con mejores condiciones el caos que heredaron de anteriores gobiernos
A dos años de la presente administración del alcalde José Luis Urióstegui Salgado, el Sistema de Agua Potable y Alcantarillado de Cuernavaca (SAPAC) presenta avances con las medidas administrativas, técnicas y financieras acordadas por la Junta de Gobierno para enfrentar con mejores condiciones el caos operativo y financiero con el que heredaron el organismo, optimizando la operatividad, la infraestructura y los resultados para que la mayoría de los usuarios reciban sin interrupción el agua potable para su uso racional de forma consciente y sostenible.
El presidente municipal, José Luis Urióstegui, destacó que entre las acciones que se han llevado a cabo se encuentra la sustitución y reparación por avería de las bombas abastecedoras que no habían tenido el mantenimiento requerido y que hoy están funcionando sin cortes de energía, al actualizar el rezago de pagos mediante el convenio suscrito con la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
Lo anterior, se logró gracias a la aplicación de una rigurosa disciplina presupuestal que ha permitido operar con finanzas más sanas, por lo que de enero a octubre del presente año pagaron a la paraestatal un total de 124 millones 743 mil 174 pesos, garantizamos el pago puntual del suministro de energía eléctrica, beneficiando a la ciudadanía con el abasto continuo del vital líquido.
En materia de agua potable, el alcalde enfatizó que se tomaron decisiones de manera colegiada y decisivas por parte del Cabildo, para el futuro de la ciudad dadas las condiciones de sequía que el país viene padeciendo y que el propio CONAGUA ha confirmado, una de ellas fue la inversión de 28 millones 345 mil 254 pesos para rehabilitar 22 de las principales fuentes de abastecimiento de agua de la capital morelense, que de no haber tomado esta decisión la escases de agua hubiera llevado al racionamiento obligatorio del agua y a su uso exclusivamente para beber.
Pese a que este 2023 se vivió una de las temporadas de sequía y estiaje más complicadas, que generó un déficit en las fuentes de abastecimiento de aproximadamente un 22 por ciento menos de disposición de agua, se llevaron a cabo 181 mil 735 movimientos de válvulas; además de incrementar los apoyos en la modalidad alterna de abasto a través de cuatro mil 427 carros- cisternas (pipas) para cubrir las necesidades prioritarias en las zonas con mayores complicaciones para llevar el servicio como un apoyo gratuito a las familias cuernavaquenses.
Bajo la tesitura de que la reparación de fugas de agua potable es una constante y un punto crucial en los trabajos y acciones de mitigación por las reducciones de los caudales, SAPAC reparó este año más de 900 fugas de línea y atendió más de mil 470 fugas en toma domiciliaria, instalando también 24 bombas nuevas en beneficio de 94 mil 376 habitantes.
José Luis Urióstegui puntualizó que SAPAC no solamente se ha preocupado por dotar de agua a los habitantes de Cuernavaca, también se ocupa de que sea agua apta para el consumo humano, para ello recibe un tratamiento previo a su distribución; la capital morelense se ha colocado por encima de la media requerida del 85 por ciento con un 87.18 por ciento de efectividad en la verificación de 1 mil 847 puntos de monitoreo de cloro residual libre en el agua hecho por la Comisión para la Protección contra Riesgos Sanitarios del Estado de Morelos.
Durante este segundo año de gobierno, SAPAC ha mejorado la gestión de los recursos humanos, financieros y materiales, permitiéndoles una operatividad más ágil y eficiente en la atención a la ciudadanía, así como se ha profesionalizado la administración del sistema, evitando así los procedimientos irregulares que anteriormente desarticularon el funcionamiento del organismo.